Flan de manzana y pera

Las frutas suelen ser un ingrediente especial en la repostería, pues son versátiles y aportan color y sabor. El flan de manzana y pera es una receta deliciosa que combina dos frutas que van juntas a la perfección. Su textura agradable lo hace realmente irresistible.

Las manzanas son beneficiosas para el aparato digestivo. Contienen pectina, un tipo de fibra que elimina las toxinas del organismo. Las fibras de la manzana también ayudan al buen funcionamiento de los intestinos y previenen enfermedades del colon.

Las peras, por su parte, son frutas ricas en vitamina C. Esta vitamina es un antioxidante que actúa evitando los efectos negativos de los radicales libres. También contienen vitamina B3, llamada niacina; la niacina evita la arteriosclerosis y otras enfermedades del sistema circulatorio.

Ingredientes:

Cómo preparar flan de manzana y pera:

1. Precalentar el horno a 200 Cº.
2. Poner a calentar una cacerola con cuatro cucharadas de agua y la taza de azúcar a fuego bajo. Revolver mientras el azúcar se disuelve hasta que se forme un caramelo marrón.
3. Tomar un molde rectangular para el flan. Verter el caramelo y distribuirlo por toda su superficie. Hacer esto con mucho cuidado, pues las quemadas producidas por el caramelo son muy dolorosas. Reservar.
4. Triturar las galletas maría. Derretir la mantequilla y mezclar formando una pasta. Distribuirla solo por el fondo del molde, formando una capa delgada.
5. Cascar los huevos, uno por uno por separado, con el fin de verificar que no haya ninguno dañado y contamine los demás. Añadirlos a un bol con la leche condensada, la vainilla y la leche. Batir bien.
6. Lavar y pelar las manzanas y las peras. Rallarlas y añadir a la mezcla de huevos y leche condensada. Mezclar bien.
7. Verter en el molde con el caramelo y la mezcla de galletas maría.
8. Hornear durante media hora o hasta que cuaje el flan. El punto ideal lo sabremos al introducir un palillo, y que salga totalmente limpio y seco. Sacar del horno y dejar enfriar.
9. Introducir delicadamente una espátula por los bordes con el fin de separar el flan. Desmoldar. Refrigerar durante un par de horas. Servir espolvoreando canela.

Prepara esta delicioso postre de sabor ligero que alegrará cualquier tarde en casa.  Además, es una elaboración llena de nutrientes naturales, muy beneficiosos para nuestro organismo.