Crema de brócoli sin nata

La receta de crema de brócoli sin nata es realmente espectacular. Una manera sana y ligera de tomarnos una buena dosis de verduras transformadas en una fina y suave crema repleta de sabores. Este plato lo puedes tomar en caliente para esos días más fríos o directamente de la nevera. El sabor se verá modificado por la temperatura, pero igualmente estará llena de las grandes propiedades de este alimento. Si quieres disfrutar de las propiedades del brócoli con una receta fácil y muy rápida de hacer, toma nota de estas indicaciones.

Curiosidades del brócoli

El brócoli es una verdura que crece de manera silvestre desde hace 2.000 años. La naturaleza nos entrega esta deliciosa planta de forma natural, es una de las más fáciles de cultivar que existe. Los etruscos fueron los que crearon esta planta a partir de la selección de coles silvestres, fueron conservando las que más sabor y resistencia tenían, hasta dar lugar a las variedades de brócoli actuales.

Receta de crema de brócoli sin nata

Ingredientes:

Cómo preparar una crema de brocolí sin nata:

1. El primer paso para realiza esta deliciosa receta de crema de brócoli sin nata es prepara el ingrediente principal. Limpiamos bien el brócoli y vamos separando poco a poco las flores. Deben quedar lo más enteras posibles, dejando un poco de tallo. No te preocupes por la estética porque todo irá triturado, el tamaño de las flores solo influirá en el tiempo de cocción.
2. Ponemos a hervir el brócoli con agua y sal. Necesitará unos minutos para estar preparado, 15 aproximadamente, aunque dependerá del tamaño que tenga. Si quieres que no pierda el color verde intenso, escúrrelo y colócalo directamente en un bol con hielo. El cambio de temperatura rápido provocará ese efecto.
3. Picamos bien la cebolla y la pochamos con un poco de aceite. Cuando empiece a estar transparente agregaremos el brócoli. Daremos un poco más de sabor al plato y conseguiremos una textura mucho más suave gracias a la cebolla.
4. Retiramos del fuego y empezamos a triturar. Para poder darle más sabor y una textura suave iremos añadiendo caldo de verduras. Potenciará la intensidad del brócoli y ayudará a la crema a quedar perfecta, sin necesidad de añadir leche.
5. A la hora de servir, puedes poner un poco de queso de cabra por encima. Este queso es mucho más digestivo que el resto de los lácteos. Le dará un punto a la crema un poco más especial. También combinan muy bien unas pipas de calabaza o sésamo tostado aportan ácidos grasos y vitaminas que complementan está saludable receta.