Arroz con pimientos al microondas, receta de restaurante lista en 15 minutos

Este arroz con pimientos al microondas es una receta que parece sacada de un restaurante. El arroz nos salvará de más de una cena o comida especial, en la que no queremos invertir mucho dinero, pero deseamos disfrutar al máximo. Unos pimientos frescos siempre son una alegría, base de numerosos sofritos y salsas acabarán siendo los elementos necesarios para completar una guarnición o ser el protagonista de un arroz de lujo. El tipo de arroz dependerá de nuestros gustos, puede ser el que más nos guste o tengamos en casa. Atrévete a probar un delicioso arroz con pimientos al microondas, el resultado merece la pena.

Ingredientes:

Cómo preparar un arroz con pimientos al microondas

1. Esta receta de arroz con pimientos al microondas es una de las más sencillas de preparar que existen.
2. Tendremos listos unos ingredientes básicos que nos ayudarán a crear un arroz de restaurante casi sin ensuciar la cocina.
3. Preparamos la base, un sofrito en el que usaremos mantequilla en vez de aceite de oliva, le dará un acabado un poco más cremoso.
4. Pelamos y picamos muy finita la cebolla. Retiramos las semillas del pimiento rojo y troceamos, lo colocamos en un bol junto con la mantequilla.
5. Ponemos en el microondas a máxima potencia durante unos 3 minutos. Cuando estén blanditas las verduras será el turno de poner el punto de guindilla.
6. El sabor picante le dará al arroz un acabado de lujo, si nos gusta la guindilla, de lo contrario, podemos no ponerla.
7. Incorporamos la media cucharada de pimentón y el arroz. Removemos un poco para que se mezclen los sabores. Pondremos a máxima potencia durante unos 2 minutos.
8. A continuación, será el turno del caldo. Lo añadimos de una vez o poco a poco, dependiendo de cómo nos guste el arroz.
9. Ponemos a máxima potencia durante unos 15 minutos hasta que el arroz esté cocinado. Podemos dejarlo con más o menos caldo, según nos guste.
10. Para finalizar, si nos apetece un tipo risotto podemos ponerle un punto de parmesano rallado y una cucharada de mantequilla.
11. Habremos creado un plato de restaurante en un abrir y cerrar de ojos, solo nos quedará probarlo y disfrutarlo, con una copa de un buen vino y la mejor compañía posible.