Receta de Tarta de leche condensada y queso crema

Una de las mejores formas de disfrutar de un buen postre en casa es con esta receta de tarta de leche condensada y queso crema. Esta elaboración dulce no solo es económica y deliciosa, sino que es bastante sencilla de preparar. Se trata de una tarta que no requiere de horno. Sin embargo, debido a la forma de preparación de este postre, se aconseja prepararlo con al menos un día de antelación. Realmente cuantos más días esté en el refrigerador mejor, ya que sus sabores se intensifican. Será un postre de sabor a queso que sin duda gustará a todos en casa.

En el aspecto nutricional, con este postre se pueden obtener los beneficios de varios lácteos combinados, como es el caso de la leche condensada y el queso crema. Además, juntos estos ingredientes aportarán una textura muy cremosa.

Ingredientes:

Cómo preparar una tarta de leche condensada y queso crema:

1. Para la base de la tarta, triturar las galletas y colocarlas en un bol. Luego derretir la mantequilla en el microondas.
2. Agregar la canela y la mantequilla a las galletas y remover.
3. Colocar un papel para horno en un molde de unos 20 cm de diámetro. Esto se hace para que sea más sencillo de desmoldar la tarta al final.
4. Añadir las galletas por toda la base del molde. Utilizar una cuchara o las manos para aplanar toda la superficie, que quede lisa y a un mismo nivel.
5. Cubrir con papel film y guardar en el refrigerador por 20 min. Mientras tanto se prepara el relleno.
6. En un cazo a un fuego bajo, agregar la mitad de la leche, el queso crema, la nata y la leche condensada. Remover constantemente para mezclar todos los ingredientes y evitar que se pegue en la base.
7. Disolver el sobre de cuajada en el restante de leche, agregar el cazo cuando la mezcla hierva, y remover contantemente.
8. Retirar del fuego cuando vuelva a romper hervor y templar durante un par de minutos antes de verter la mezcla en el molde.
9. Dejar enfriar y guardar en el refrigerador cubierto con papel film por unas 6 horas mínimo.
10. Desmoldar y decorar la tarta al gusto con dulce de leche, chocolate, caramelo o incluso mermelada.

La presentación y el sabor de esta tarta de leche condensada es deliciosa. Es más, cuando compartas esta receta con tus amigos o familiares, se sorprenderán cuando les expliques lo sencillo que es prepararla.