Receta de mermelada de plátano casera

La mermelada de plátano casera es una conserva azucarada que se prepara con plátano como ingrediente principal. La elaboración de esta mermelada es muy fácil y necesita poco tiempo. El plátano es una fruta que gusta mucho tanto a niños como adultos, su versatilidad es increíble y se incluye en numerosas recetas. La elaboración de la mermelada en casa ofrece muchas ventajas, ya que pueden incorporarse otros ingredientes a gusto. Haciendo un poco de historia, la mermelada fue creada en 1561, por el médico de la Reina de Francia: mezcló pulpa de naranja con azúcar para aliviarle los mareos causados por los viajes en barco. De ahí en adelante han surgido innumerables recetas y combinaciones.

El plátano es una fruta que ofrece mucha energía al organismo. Se recomienda su consumo en personas que realizan actividades de exigencia física. Tiene la propiedad de aumentar la capacidad de resistencia después de una dura jornada física. Además, la combinación que contiene de hidratos de carbono y potasio, colaboran para mejorara la función muscular.

Ingredientes:

Cómo preparar mermelada de plátano casera:

1. Pelar los plátanos y cortarlos en trozos.
2. En un recipiente, incorporar los plátanos picados, agregar el zumo de un limón y las dos tazas de azúcar. Mezclar y dejar reposar durante 30 minutos.
3. A continuación, verter la mezcla de plátanos en una cacerola y añadir las cinco gotas de esencia de vainilla. Calentar a fuego medio hasta llegar a ebullición. Al hervir, bajar el fuego a bajo y dejar cocinar durante 45 minutos. Remover de vez en cuando para evitar se pegue.
4. Transcurridos los 45 minutos, apagar el fuego y retirar.
5. Inmediatamente, con ayuda de una batidora, triturar la mezcla de plátano hasta obtener una mezcla homogénea.
6. Esterilizar un frasco de vidrio para envasar la mermelada de plátano casera.
7. Verter la mermelada aún tibia dentro del frasco de vidrio esterilizado. Tapar herméticamente y voltear el frasco boca abajo durante una hora. Esto ayuda a crear el vacío para prolongar la conservación de la mermelada.
8. Refrigerar en la nevera.

Escoge unos plátanos maduros y amarillos para realizar esta deliciosa preparación que no te quitará mucho tiempo. Es una opción para variar desayunos y meriendas. Incluso para preparar postres. Una vez que aprendas la receta, todo dependerá de tu imaginación. A los más pequeños de la casa les encantará su sabor y su textura.