Receta de dulces turcos: sutlac
¿Te apetece elaborar en casa un postre procedente de la mejor cocina turca? Prueba con esta receta de sutlac turcos, son muy sencillos de hacer. Te va a sorprender.
El sutlac es uno de los dulces de Turquía con más renombre. Y a pesar de tener tan pocos ingredientes, se ha convertido en uno de los más codiciados de los habitantes del país y sus turistas. La etimología viene de las palabras «sütlü as» y significa «plato o comida con leche». Existen dos tipos de sutlac: uno, que es el más consumido, se parece al arroz con leche de la cocina internacional, pero tiene ciertas variantes con las cantidades en los ingredientes y con la manera de prepararse. El segundo, es llamado firin sütlac y para este se utiliza el horno. Tradicionalmente, se elabora en una cazuela de barro (tal como una lasaña) y tiene un aspecto un poco quemado en la superficie gracias al caramelizado del azúcar y la yema del huevo. El sütlac es del pueblo de Hamsiköy; específicamente de una provincia llamada «Trabzon», en la que, de hecho, se celebra un festival dedicado a este dulce turco. En algún momento fue servido solo para las élites, pero después se popularizó y todas las madres se lo preparaban a sus hijos principalmente por estar dotado de leche. Sobre todo, a los que rechazaban más los alimentos. El sutlac era bien recibido por su dulzura; y al mismo tiempo, ayudaba a la madre gracias a su alto valor nutricional.
En una porción de sutlac están todos los macronutrientes necesarios para complementar una alimentación balanceada. Posee los hidratos de carbono del arroz; que a su vez, contiene las vitaminas B1 y B6, niacina, yodo, magnesio y calcio. La vitamina B1 ayuda a convertir los alimentos en energía. La B6, interviene en el desarrollo del feto en el embarazo y la niacina ayuda a mantener la salud del sistema nervioso. El yodo contribuye con el buen funcionamiento de la toroides. el magnesio es un mineral que ayuda al funcionamiento de los músculos.
Y también están presentes las proteínas de alta calidad de la leche, necesarias para el desarrollo de los músculos, para fortalecer el sistema inmune y para generar algunas hormas. Este postre también contiene las grasas poliinsaturadas de la misma, además del calcio y otros minerales vitales. El calcio es fundamental para el desarrollo y la salud de los huesos y dientes. Gracias a todos estos nutrientes, el sutlac es un postre realmente muy nutritivo, que se puede elaborar de forma sencilla en casa.
Ingredientes:
Preparación:
- En primer lugar, tomar una cacerola y encender la cocina a temperatura media-baja.
- Verter el arroz en la cacerola y luego el agua. Se debe procurar que termine de consumirse todo el líquido, sin que se queme el arroz, hasta que llegue al punto de estar tierno.
- Añadir al arroz el azúcar, la leche, la vainilla y la canela a fuego más bajo, para que se cocinen lentamente durante unos 20 minutos.
- Tomar un recipiente pequeño (puede ser una taza) y mezclar la maicena con un poco de agua. Batir bien y asegurar que no queden grumos o pelotillas.
- Agregar la mezcla de maicena al arroz con la leche y dejar cocinar unos 5 minutos más.
- Verter el arroz en un recipiente en el que se pueda insertar en temperaturas altas y bajas para que se sirva cuando necesite estar en el horno y en el refrigerador.
- Encender el horno a 180 grados centígrados y pintar los recipientes en la superficie con la yema de huevo.
- Esperar a que se dore la parte de arriba de la preparación (unos 10 minutos o menos) y sacar del horno para dejar reposar.
- Después de que la preparación esté a temperatura ambiente, poner a enfriar en la nevera durante unas 2 horas.
- Espolvorear canela por encima, servir con una cuchara y ¡a comer se ha dicho!
Si quieres preparar el otro tipo de sutlac, tan solo debes quitarle el ingrediente del huevo y prescindir del uso del horno. También es una alternativa colocarle ralladura de cáscara de limón a la preparación mientras se está cocinando, solo la parte verde de la fruta porque sino se amarga. Y puedes, además, usar tanto canela en rama como en polvo (o ambas). Dependerá de tus gustos. Y si quieres darle un toque que contraste, agrega, al final, un punto de sal.
Regresa a los dulces sabores de la infancia, a esos de la leche y las natillas, con este delicioso dulce turco. Lo sirven tanto en restaurantes como en hogares comunes, y a partir de que aprendas esta receta, en tu hogar. Tradicionalmente se prepara con leche fresca, pero si no tienes acceso a esta, no te preocupes, la que venden en el supermercado servirá. Así que revive ese niño que llevas dentro y engolosina tu día preparando este postre turco cuanto antes.