Los mejores trucos de cocina
Los mejores trucos de cocina te ayudarán en casa para que sea más fácil y práctico tu día a día. Apunta estos consejos y notarás la diferencia.
El cuerpo humano es una “máquina” de trabajo que requiere una fuente de energía para poder enfrentar las actividades diarias. La materia prima que se requiere está básicamente concentrada en la ingesta de alimentos de manera sana y saludable. El cuerpo obtiene energía, producto del metabolismo de los alimentos que se ingieren en las comidas. Una vez hecha la digestión, los alimentos se transforman en nutrientes energéticos. Para aprovechar y disfrutar de cada alimento, hace falta conocer los mejores trucos de cocina e implementarlos cada día en casa.
Cocinar en casa, una actividad saludable
Hay una creencia muy cierta de que la comida casera es la mejor para gozar de buena salud. El primer argumento es la posibilidad de crear recetas y platos con la debida selección de alimentos en buen estado. Por otra parte, la comida elaborada en casa suele ser menos calórica que la que se compra. También ofrece el beneficio de ajustar las recetas a las necesidades y preferencias de los habitantes del hogar. Al cocinar, se precisa la cantidad de las porciones y la libertad de escoger el método de cocción más apropiado. Es una actividad aliada a una dieta saludable, además de un acto de amor para los seres queridos y para sí mismo.
Los mejores trucos de cocina
Se pueden aprovechar los ingredientes que se tienen en casa para preparar exquisitos platos y muy saludables. Al hacerlo suelen presentarse muchas dudas en cuanto a cantidades, métodos, conservación y tipo de ingredientes a utilizar. Lo importante es hacer de la cocina una actividad sencilla, saludable y práctica. Para ello, se presentan algunos de los mejores trucos de cocina:
- Congelar verduras crudas (por ejemplo: cebolla, zanahoria, pimiento, puerro, apio), separadas en bolsitas para ser utilizadas para sofritos, sopas, etc.
- Mantener las especias lejos del calor de la cocina. El calor merma su frescura.
- Tener a la mano una tabla de conversiones de cocina. Es decir, la semejanza de medidas entre mililitros, tazas y onzas.
- Congelar verduras ya horneadas o cocidas por porciones (berenjenas, cebollas, calabacín, pimientos, etc.). Esta es una manera de ahorrar tiempo para cocinar.
- Tapar la bandeja con papel aluminio. Así se agiliza la cocción de alimentos en el horno y se conserva su sabor.
- Utilizar cortes de carne y partes de las aves que por lo general se desechan. Para un buen caldo de pollo, por ejemplo, se utilizan alitas en lugar de la caparazón.
- Pochar el ajo en último lugar. Al hacer un sofrito, el ajo debe ser el último ingrediente, pues se quema con facilidad.
- Dejar marinar las carnes, verduras y otros alimentos durante la noche o cuando se está en horas de trabajo. Reduce el tiempo para cocinar e incrementa el sabor.
- Esperar que se enfríen por completo las tartas y bizcochos para cortarlos. Esto, evita a que se desmoronen.
- Descongelar con tiempo los alimentos para desechar el líquido que destilan al descongelarse. Esto, garantiza mayor calidad al prepararlos.