El ingrediente que casi nadie conoce y que es esencial para que las alitas de pollo queden súper crujientes

Las alitas de pollo súper crujientes son un buen básico de cualquier cocina. Un plus de buenas sensaciones que vamos a poder poner en práctica y que quizás hasta ahora no hubiéramos tenido en consideración. El pollo es una de las carnes que más utilizamos en casa, un ingrediente que, sin duda alguna, puede acabar convirtiéndose en nuestro mejor aliado de una serie de elementos que serán claves. Sin duda alguna, deberemos empezar a pensar en un cambio a la hora de cocinar el pollo que nos sorprenderá.

Ese tipo de recetas que incluyen un plus de buenas sensaciones que pueden acabar marcando una diferencia importante. Un ingrediente que todos tenemos en casa puede acabar convirtiéndose en ese elemento que hasta la fecha no hubiéramos ni esperado. Por lo que, quizás tendremos que empezar a ver un cambio que puede convertirse en nuestro mejor básico, esas alitas de pollo que queremos que queden súper crujientes acabarán siendo una realidad con pequeños toques que se convertirán en la mejor opción posibles. Este ingrediente te servirá para descubrir lo bien que pueden quedar las alitas de pollo.

Este ingrediente que casi nadie conoce

Freír las alitas de pollo es algo que se suele hacer para conseguir este plus de crujiente y de sabor que queremos empezar a ver llegar a nuestro día a día. Es hora de alejarnos de lo que sería diferente, en esencia lo que nos está esperando es un importante cambio que puede ser esencial.

Son tiempos de aprovechar al máximo cada uno de los elementos que queremos poner en práctica. Estaremos a merced de una situación que puede acabar siendo clave en estos días que hasta la fecha no hubiéramos ni esperado. Se puede conseguir un importante crujiente con un detalle esencial.

Sólo necesitamos un poco de levadura o de polvo de hornear para mezclar con esa harina y especies que usamos para rebozar las alitas. Cada uno tiene sus trucos para hacer realidad este cambio que necesitamos en estos días que hasta la fecha no pensábamos.

Puede ser muy sencillo empezar a usar un cambio de tendencia que, sin duda alguna, acabará marcando una diferencia indispensable. Una cucharada de café a esta mezcla puede acabar siendo lo que nos haga descubrir este cambio de tendencia del todo inesperado.

Este es el truco para que las alitas de pollo queden crujientes

Unas alitas de pollo crujientes es la mejor opción que puede acabar siendo lo que nos marcarán en estos días que tenemos por delante. Un cambio de tendencia que, sin duda alguna, nos ayudará a crear la mejor tapa o plato posible, con unas patatas o una ensalada, podemos tener la mejor cena o comida lista a gran velocidad.

Te proponemos una sencilla receta que puede acabar siendo lo que nos acompañará en estos días, un buen básico que puede acabar siendo lo que nos ayude a descubrir esta receta espectacular.

Ingredientes para 4 personas:

Adobo

• El zumo de un limón
• Una cucharadita de ralladura de limón
• ½ de cucharadita de romero seco
• 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• ½ cucharadita de pimienta blanca
• 1 cucharadita de vinagre balsámico
• Alas de pollo fritas

Preparación:

1. Añade las alas de pollo a la bolsa Zip. Cierra la bolsa y frota la carne con los ingredientes de adobo.
2. Deja reposar media hora mínimo (mejor si es una hora) en un lugar seco pero no en la nevera (puede ser en el interior del microondas o el horno). No te preocupes que como luego las cocinaremos a altas temperaturas no hay duda de contaminación bacteriana.
3. Cinco minutos antes de preparar las alitas de pollo fritas, las sacamos de la bolsa Zip y escurrimos bien.
4. Añade a una sartén con aceite de oliva, unos 60 ml aproximadamente, que cubra el fondo. Prepara también un plato con papel de cocina, dónde dejaremos las alitas una vez cocinadas.
5. Calienta el aceite y fríe las alitas por tandas unos 2 o 3 minutos por cada lado o hasta que estén a tu gusto. Una vez fritas deja que reposen en el plato con papel de cocina para que vayan soltado el exceso de aceite.
6. A la hora de servir no hace falta añadir sal, ya que las hemos tenido con salsa de soja que es muy salada. Añadimos un poco de zumo de limón que aporta vitamina C y combina muy bien con la carne de pollo.

Atrévete a probar con un plus de buenas sensaciones que, sin duda alguna, puede acabar siendo lo que nos acompañará en estos días. Un cambio que puede acabar marcando los mejores ingredientes posibles para una receta espectacular.