Hojaldre con frutos secos

Este delicioso postre de hojaldre con frutos secos se basa en el famoso postre catalán llamado “de música”, solo que, en esta ocasión, la base es sustituida por el hojaldre, lo que le otorga un sabor más especial, sin contar con que también mejora considerablemente la imagen. El nombre del postre clásico de origen español se debe a que se les ofrecían frutos secos a los músicos callejeros porque era algo que podían comer rápidamente mientras tocaban.

Además de su exquisito sabor, este postre también proporciona muchos beneficios para el organismo y no solo por la presencia de los frutos secos, sino también por el hojaldre, y es que contrario a lo que muchas personas puedan imaginar, este ingrediente es una buena fuente de vitamina K, esencial para prevenir problemas de osteoporosis, algunos problemas neuronales e incluso previene la aparición de algunos tipos de cáncer. Por otro lado, también es una excelente fuente de hierro y calcio. Por supuesto, para disfrutar de estos beneficios es importante cuidar la cantidad porque también es rico en calorías.

Junto a lo anterior, los frutos secos protegen la salud del corazón porque son ricos en potasio y bajos sodio. Gracias a estos componentes también son recomendados para proteger los huesos y los músculos, sin contar con que tienen propiedades antiinflamatorias, lo que también favorece las articulaciones y reduce los síntomas asociados a la artritis. Además de ello, tienen altos niveles de vitamina E y proteína, nutrientes claves para el cabello y la piel. Como ventaja adicional, los frutos secos son grasas saludables, por lo que su consumo moderado es recomendado para mejorar los niveles de energía y mantener un peso saludable.

Ingredientes:

Cómo preparar el hojaldre con frutos secos:

1. En un bol lo suficientemente grande, agrega la nata, la miel y el azúcar. Así como también los frutos secos troceados, a excepción de los piñones que sí deben permanecer enteros.
2. Llevar el bol a fuego medio y cuece durante tres minutos
3. Transcurrido el tiempo anterior, deja enfriar y refrigera la mezcla.
4. En una bandeja para horno, coloca papel de horno y corta la lámina de hojaldre en rectángulos, colócalos en la bandeja y píntalos con el huevo.
5. Precalienta el horno a 200 grados centígrados
6. Coloca una cucharada de la mezcla que tenías reservada en la nevera dentro de cada rectángulo y cuece en el horno durante 15 minutos.
7. Finalmente, deja que los postres enfríen y decora con un poco de azúcar glas al gusto.

Este es un postre delicioso y muy fácil de hacer, por lo que puedes tener listo en pocos minutos. No tiene ninguna dificultad hacerlo y el resultado es extraordinario. Sorprende a tu familia con algo diferente, elegante y delicioso, anímate a hacerlo.