Huevos rellenos al roquefort

Huevos rellenos al roquefort, un plato original y fresco para el varano. Lo puedes preparar de un día para otro y tenerlo en la nevera. Se acompaña de ensalada de quinoa o de arroz.  En CookAffinity preparamos una receta fría con huevos y queso azul.

En verano apetecen los platos que no aporten calor, demasiadas calorías hay en el ambiente. Sin embargo las ensaladas a todo el mundo no le gustan, pasteles fríos, ensaladilla rusa, verduras rellenas o huevos son opciones interesantes para crear menús ‘anti calor’. Como todos estos platos los puedes preparar previamente te ahorras pasar más tiempo en la cocina.

El hongo Penicillium y el queso Roquefort

La receta la puedes preparar con Roquefort o cualquier otro queso azul. El queso Roquefort fue el primero de los quesos azules en lograr la Denominación de Origen, en 1925. Como nuestros quesos azules, ‘Cabrales o Picón-Bejes’, entre otros madura en cuevas o bodegas subterráneas.

El proceso de maduración mínimo es de unos 5 meses para dar tiempo a que se desarrolle el moho del género Penicillum. El tipo de hongo se llama Penicillium roqueforti en honor a este queso que si sigue preparando de la forma tradicional en bodegas subterráneas en Roquefort-sur-Soulzon.

No creas que el hongo Penicillium es raro, es el más común, de hecho está en todas partes. Cuando las naranjas o el pan se llenan de moho es también hongo  Penicillum, en este caso los hongos impiden el alimento sea comestible. Si embargo en otros casos como en los quesos azules el alimento es totalmente seguro de comer.

Receta de huevos rellenos al roquefort

Ingredientes

Preparación

2. Comenzamos cociendo los huevos en agua abundante con un poco de sal, tiempo 10 minutos. Lo dejamos enfriar. Luego vamos a preparar una salsa vinagreta. Usaremos, el aceite, el vinagre, la cebolla picada, el perejil también picado.Lo mezclamos todo en un recipiente y lo reservamos.
3. A continuación en otro recipiente distinto ponemos el queso roquefort y una cucharada de leche evaporada. Esta leche sustituye a la nata con mucha menos grasa. La puedes encontrar en cualquier supermercado. Machacamos el queso aplastándolo con el tenedor o la maza del mortero. Luego vamos añadiendo la vinagreta sobre el queso, mezclar hasta obtener una crema bastante homogénea. Ahora añadimos la leche evaporada.
4. Ahora tenemos que pelar los huevos duros.  Si quiere saber cómo pelar fácil un huevo duro puedes consultar este artículo. Pelamos y cortamos por la mitad. Extraemos las yemas, las machacamos en un recipiente. Ahora ponemos una cucharadita de yema en el fondo de cada huevo y otra más generosa de la mezcla del queso azul que preparamos antes. Puedes rematar con un unas pipas de girasol o un trocito de jamón de york.

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