Lasaña de espinacas

La receta de lasaña de espinacas nos permite disfrutar de un delicioso plato ideal para poder sentirnos mucho mejor. Las espinacas son una verdura con muchas propiedades que serán la base principal de una lasaña con mucho sabor. Además, podrás prepararla en unos pocos minutos y ser capaz de hacer que todo el mundo se enamore de esta receta. La textura de la lasaña es tan suave y delicada que harás las delicias de los paladares más exigentes. Toma nota y empieza a buscar los ingredientes de esta lasaña de espinacas.

Ingredientes:

Cómo preparar una lasaña de verduras:

1. Preparar esta receta de lasaña de espinacas es muy sencillo. Empezaremos preparando las espinacas. Esta verdura está disponible en multitud de formatos. La puedes comprar fresca, congelada o en conserva. Elige la que más se adapte a tu estilo de vida. Si optas por una congelada o fresca, el primer paso será hervir las espinacas. Se tarda unos 5 minutos en cocinarlas, quedarán perfectas y conservarán todo su sabor.
2. Empezamos a preparar la bechamel, que es uno de los puntos fuertes de cualquier lasaña que se precie. Derretimos la mantequilla en un cazo y añadimos dos cucharadas de harina. Las rehogamos bien hasta que la harina se dore un poco. Este paso es importante, el sabor de la harina cruda no es demasiado agradable. Cuando esté lista iremos añadiendo la leche y iremos removiendo poco a poco. La bechamel se irá formando a medida que la harina vaya absorbiendo la leche.  A continuación, podemos añadir un poco de sal y si lo deseas nuez moscada, le da un toque muy bueno.
3. Picamos la cebolla y la sofreímos con un poco de aceite en una sartén. Este sofrito dará sabor a nuestras espinacas que añadiremos cuando la cebolla ya esté transparente y tierna. Al incorporar las espinacas que deben estar bien escurridas tendremos la mayor parte del trabajo hecho. Para darle un poco más de textura y sabor podemos añadir unos piñones y pasas. Son muy nutritivos y cambian un poco la percepción de esta lasaña. En este punto, añadiremos la bechamel hasta que quede un relleno compacto.
4. Es momento de montar la lasaña. Mientras lo hacemos podemos precalentar el horno bien. A continuación, ponemos una placa de lasaña en el fondo y el relleno. Repetimos la operación un par de veces, hasta llegar a lo más alto de la bandeja. Es momento de poner la bechamel sobrante y añadir un poco de queso rallado. Horneamos unos 20 minutos a 200 º y conseguiremos que el queso de gratine perfectamente. Solo te quedará servirla y disfrutar de un plato delicioso y muy sano.