La estrategia de Mazón de presentarse por Alicante dio la puntilla al PSOE: el PP le sacó cuatro diputados

La estrategia de Carlos Mazón, líder del Partido Popular en la Comunidad Valenciana, de presentarse por Alicante ha sido clave en el desmoronamiento del PSOE del principal barón territorial valenciano, Ximo Puig. Mazón decidió presentarse por la provincia de Alicante y disparó los resultados. El PP ha obtenido 15 diputados por esta circunscripción, cuatro más que el PSOE, que ha logrado 11. Además, ha invertido la tendencia de hace cuatro años, doblando los 7 diputados del PP en esa circunscripción en 2019, frente a los 10 del PSOE, entonces.

Frente a ello, la ocurrencia del socialista Ximo Puig de liderar la lista del PSOE a las Cortes Valencianas por la provincia de Valencia y no por Castellón, como en las dos citas electorales autonómicas anteriores, le ha reportado a este último 12 diputados, sólo dos más que en 2019, mientras que la cabeza de lista del PP María José Catalá ha sumado 15 frente a los siete que los populares obtuvieron en 2019. Acierto estratégico de Mazón y error de Ximo Puig.

De hecho, Carlos Mazón será en el primer primer presidente de la Generalitat Valenciana que acceda a esta responsabilidad encabezando una lista electoral por la provincia de Alicante. Una decisión que adoptó en su día «porque soy de Alicante y vivo aquí».

Poco después de que Mazón hiciera pública su decisión, Ximo Puig tomó la de liderar la lista a las Cortes Valencianas por la provincia de Valencia y no por Castellón, como había hecho en las dos convocatorias anteriores.

En círculos políticos valencianos se habló entonces de un batalla de estrategias de alto nivel entre los dos principales candidatos. Sin embargo, apenas 48 horas después de los comicios, lo que toma un verdadero valor estratégico es la decisión de Carlos Mazón. Presentarse por Alicante le otorgó una ventaja decisiva respecto a su oponente. Los 15 diputados logrados en Alicante han valido su peso en oro.

Tres movimientos estratégicos

En realidad, los movimientos estratégicos de Mazón fueron tres. Uno, el de presentarse él por Alicante. Otro, el de presentar como cabeza de lista a las Cortes Valencianas por la provincia de Valencia a María José Catalá, que lideró también la candidatura al Ayuntamiento de Valencia. Y, el tercero, y no menos importante, que el último ex presidente de la Generalitat Valenciana del PP, Alberto Fabra, encabezara la candidatura al Parlamento autonómico por la provincia de Castellón.

Este último relató durante un acto del PP en Castellón a pocos días de las elecciones como Mazón consiguió convencerle para liderar la lista autonómica del PP por esa provincia en un almuerzo juntos en una pizzería de Valencia. 

Los tres han ganado. En Alicante, Mazón, como se ha dicho dobló los escaños del PP en 2019: de siete a 15. En Valencia, con Catalá, ocurrió lo mismo. Y, en Castellón, con Fabra, también: de cinco a 10.

En el polo opuesto está la estrategia de Ximo Puig. Porque su decisión de presentarse por Valencia no le ha evitado perder. Pero sí, le ha privado, posiblemente, de un mejor resultado de haber comparecido en Castellón como en las dos ocasiones anteriores.

La Diputación de Alicante

Pero además Carlos Mazón prestó el 28M un último servicio al PP en la Diputación de Alicante. En esta provincia, donde los populares habían obtenido 14 diputados en 2019, ahora ha llegado a los 17, después de presidir Mazón la institución los últimos cuatro años.

Si en los anteriores comicios (2019) el PP fue la segunda fuerza más votada para la institución provincial, en 2023, tras cuatro años de presidencia de Carlos Mazón, el PP ha obtenido la mayoría absoluta, a la que no llegaba desde 2011. Es el efecto, también, de una decisión estratégica y personal que ha rentabilizado al máximo su partido: la de presentarse por Alicante.