Prueba esta crema fría de langosta con un toque de azafrán
La langosta es uno de los grandes ingredientes marinos, llenos de sabor. Prueba esta crema fría de langosta con un toque de azafrán.
Langosta al estilo marinero
Langosta arrecife, de Jamaica
Crema fría de garbanzos con concasse de tomate y jamón
Esta crema fría de langosta con un toque de azafrán es muy fácil y rápida de hacer. Aunque las sopas y cremas frías se acostumbran a tomar durante los días calurosos del verano, pueden disfrutarse ahora todo el año, en parte por culpa del calentamiento global y el cambio climático, y en parte porque no hay razones para dejar de tomar estas deliciosas cremas sin importar el clima que esté haciendo fuera.
La crema con un toque de azafrán es muy similar a la bisque, un plato francés tradicional del que existen referencias desde el siglo XVII, en las que se menciona una bisque elaborada con pichones trufados, aunque actualmente se asocia principalmente con mariscos.
Las sopas y cremas frías son una alternativa para comer de forma sabrosa y saludable los días más calurosos del año, por lo que no es de extrañar que existan notables ejemplos de esta preparación en distintas partes del mundo, como es el caso de la vichyssoise francesa o el tarator de los países balcánicos, y en nuestro país, el gazpacho andaluz o el salmorejo cordobés.
Ingredientes:
Cómo preparar esta crema fría de angosta con un toque de azafrán:
- Cortar el ajo en rodajas finas y la cebolla en brunoise. Cortar la langosta en trozos.
- En una cacerola derretir la mantequilla y a continuación agregar la cebolla, cuando comience a pocharse, incorporar el ajo y cocinar a fuego bajo hasta que la cebolla se transparente por completo y el ajo esté dorado.
- Mezclar en un cuenco la harina, sal y pimienta y luego incorporar al sofrito en la cacerola; remover hasta que adquiera un tono dorado.
- Agregar la leche despacio, mientras se remueve y se pasa a fuego medio.
- Incorporar los trozos de langosta y una vez que hierva, agregar la nata y seguir removiendo.
- Envolver las hebras de azafrán en papel de aluminio y tostar en una sartén, a fuego medio, durante 30 segundos.
- Retirar y echar las hebras en la crema, y seguir revolviendo hasta que el azafrán se integre bien.
- Rectificar el punto de sal y pimienta del conjunto. En este punto también pueden agregarse otras hierbas aromáticas y especias al gusto, como podría ser el caso del eneldo fresco picado.
- Dejar enfriar y luego guardar en la nevera al menos una hora antes de servir.
Prueba esta crema fría de langosta con un toque de azafrán, que puedes acompañar con rodajas de pan de pueblo y una copa de buen cava. Puede ser un excelente plato de entrada en cualquier estación del año.