El alcalde socialista de Barcelona, Jaume Collboni, estrena despacho sin la bandera de España

El nuevo alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, no luce la bandera de España en su despacho del consistorio municipal. Así se puede comprobar en una imagen que han colgado los servicios de comunicación del Ayuntamiento de Barcelona en sus redes sociales mientras firmaba sus primeros decretos. El dirigente del PSC fue elegido gracias al voto favorable de los Comuns de Ada Colau y el Partido Popular de Daniel Sirera.

Collboni fue investido el pasado sábado como alcalde de la Ciudad Condal al contar en el pleno con los votos favorables de 23 de los 41 concejales que lo integran, en una votación que se realizó de forma nominal y con papeleta secreta, impidiendo así el paso a los separatistas al gobierno municipal con Xavier Trias -que ganó los comicios- a la cabeza. El socialista se alzó con la vara de alcalde tras obtener 10 concejales en las elecciones municipales del 28 de mayo, uno más que en los comicios de 2019, cuando consiguió 8.

En un giro de guión en el último momento, en el que participaron los Comuns y el PP -en una negociación que se llevó a cabo en Madrid entre Elías Bendodo y Santos Cerdán, pero en la que participaron también Pedro Sánchez, Salvador Illa y Yolanda Díaz-, los tres partidos constitucionalistas lograron evitar que por primera vez en democracia los independentistas gobernasen la segunda ciudad del país. Las bases de Junts y ERC en Barcelona, horas antes del pleno de investidura, habían avalado gobernar conjuntamente con Trias como alcalde y el apoyo de 16 concejales.

La presencia de la bandera española en las instituciones catalanas siempre ha sido objeto de polémica. El ex presidente de la Generalitat Quim Torra llegó a descolgar la rojigualda del Palau de la Generalitat en 2020. Torra tomó la decisión tras conocer su inhabilitación por parte de la Junta Electoral Central por no haber retirado la pancarta en favor de los presos independentistas durante el periodo electoral del balcón de la sede del gobierno catalán.

Un año más tarde, durante la recepción del nuevo president Pere Aragonés a Pedro Sánchez en su despacho, el líder separatista también retiró la bandera de España del lugar en el que compareció ante los medios de comunicación durante su presencia. Minutos antes se había dirigido ante la ciudadanía Sánchez, en ese mismo espacio, con las dos banderas constitucionales presidiendo el acto.