Sánchez prohíbe a Belarra y Montero comparecer en Moncloa hasta después de las elecciones del 28M

Moncloa silenciará a Ione Belarra e Irene Montero de aquí al 28 de mayo. El PSOE, según fuentes gubernamentales, les impedirá tanto como pueda el uso de la sala de prensa gubernamental tras los Consejos de Ministros hasta las elecciones municipales y autonómicas. Todo para evitar que hagan campaña desde la mesa del Consejo de Ministros.

La decisión, que según las mismas fuentes se ha tomado por Pedro Sánchez, en conjunto con el secretario de Estado de Comunicación, Francesc Vallès, tiene el objetivo de que ni Belarra ni Montero puedan defender sus medidas en una rueda de prensa retransmitida en directo por la mayoría de medios de comunicación. Por el contrario, sí hay previsión de que Yolanda Díaz pueda comparecer en distintas ocasiones en una estrategia compartida con Sánchez.

Aunque las directrices de Sánchez y Vallès son ya concretas y concisas -vetando directamente a las dos ministras podemitas, Ione Belarra e Irene Montero- hace semanas que la secretaría de Estado de Comunicación evita darles voz. Las dirigentes de Podemos han trasladado sus quejas tanto en privado como en público, cuando se les ha impedido salir a explicar medidas que habían impulsado sus propios ministerios.

El último caso fue el de la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, con motivo de la aprobación en el Consejo de Ministros de la Ley de Familias. Pese a tratarse de una norma que se había redactado desde su departamento y trasladar su gabinete una petición expresa para comparecer ante los medios de comunicación, el responsable de comunicación del Gobierno se lo impidió.

En su lugar, la secretaria general de Podemos acabó grabando un vídeo, que difundió en las redes sociales antes de la rueda de prensa oficial, para sacar pecho por la norma. Un gesto que, aunque no era nuevo, causó un profundo malestar en la parte socialista del Ejecutivo. El uso de las plataformas comunicativas gubernamentales ha sido, a lo largo de toda la legislatura, una cuestión que ha generado múltiples polémicas entre los dos socios de coalición.

En los inicios de la legislatura, el ex vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, llegó a estar hasta seis meses sin pisar la sala de prensa de La Moncloa. Como ahora, fue una decisión personal de Pedro Sánchez para evitar que sus socios pudieran hacer un discurso más duro del que la estrategia monclovita pretendía lanzar.