Endivias con queso azul

Las endivias con queso azul son una ensalada ligera, deliciosa y sabrosa. Se trata de un plato muy fácil de preparar que hará las delicias de los más exigentes. Las endivias son perfectas para convertirse en el eje central de un entrante. Se trata de un alimento saludable con un punto amargo que las hace especialmente beneficiosas para los amantes de los sabores más originales. Si combinamos este ingrediente con un queso azul, lograremos una gama de sabores salado y contundente que con unos frutos secos como las nueces lograrán un protagonismo ejemplar. Toma nota de cómo se preparan unas sencillas endivias con queso azul y atrévete a probarlas.

Ingredientes:

Cómo preparar endivias con queso azul

1. Limpiamos las endivias con cuidado, nos interesa que queden lo más enteras posibles para poder impregnarse de todos los sabores, les quitaremos las parte más duras que podemos trocear para que sean más fáciles de comer.
2. En una sartén con un poco de aceite de oliva vamos poniendo el queso en trocitos de más o menos el mismo tamaño. Nos interesa que el queso se funda y quede una base cremosa. Le añadiremos un poco de nata para cocinar.
3. Vamos mezclando estos ingredientes. Podemos poner un poco de sal, aunque el queso ya es bastante salado y para darle un punto picante le añadimos pimienta negra molida. Conseguiremos en unos minutos un tipo fondue de queso muy sabroso, una salsa que combinará de cine con las endivias.
4. La cantidad de queso o de nata dependerá un poco de los gustos. El queso azul es muy fuerte y al igual que el roquefort o cabrales será algo que dará mucha personalidad a estas endivias.
5. Esta especie de salsa de queso la podemos utilizarla en carnes o en pasta a modo de salsa, pero en esta receta será el acompañamiento perfecto de las endivias.
6. Ponemos las endivias en el plato y les añadimos un poco de esta mezcla de queso y nata, es importante hacerlo en caliente, cuando se enfría es más difícil de manipular.
7. Cuando tenemos las endivias bien untadas con el queso le daremos un toque final, añadiremos por encima unas nueces picadas. Las pondremos repartidas por encima. También podemos poner unas semillas, le darán el toque crujiente que nos irá de maravilla. Servimos templadas, estarán espectaculares.