Alcaraz cumple con Norrie y se regala un partidazo con Nadal
Carlos Alcaraz superó en tres sets (6-4, 6-7, 6-3) a Cameron Norrie y se cita con Rafa Nadal en el duelo más esperado en cuartos del Mutua Madrid Open.
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Habrá un Alcaraz-Nadal en el Mutua Madrid Open. Carlitos cumplió con su parte con la suficiencia de un veterano y apartó del cuadro a Cameron Norrie (6-4, 6-7, 6-3) en un partido en el que, pese a ceder el segundo set, se demostró el momentazo de forma que vive el murciano y la calidad interminable de su tenis. En el día de su 19 cumpleaños, Alcaraz se regaló una victoria sufrida, pero notable y un encuentro con Rafa que este viernes hará estallar la Caja Mágica.
Alcaraz fue más que Norrie en un encuentro que alcanzó picos de mucho nivel sobre el tapete madrileño. La diferencia estuvo, más que en la potencia, en la paleta de golpes de Carlitos, que los tiene todos y es capaz de acudir a alternativas mayores para sacar adelante un encuentro. Además, con la confianza por las nubes, los puntos de inflexión fueron suyos en el primer y el tercer set y le llevaron a imponerse.
Día especial en la Caja Mágica por el cumpleaños de la gran sensación del tenis mundial. Carlitos Alcaraz, que ya celebró en 2021 su mayoría de edad en el Mutua Madrid Open, alcanzaba los 19 coincidiendo con su encuentro de octavos de final ante el siempre complicado Cameron Norrie, al que Alcaraz parecía, eso sí, tener tomada la medida con un 2-0 en el head to head, con la última victoria lograda en el pasado Masters 1000 de Indian Wells.
Norrie es un jugador heterodoxo pero que puede llegar a ser muy, muy competitivo en cualquier superficie. El objetivo de Alcaraz era impedir que se metiera en el encuentro y así empezó, golpeando a mil por hora cada pelota y tratando de tomar una ventaja que le hiciera ponerse por delante y marcar territorio en la que ya es su tierra.
Era su día y no quería que nada ni nadie se lo truncase, pero Norrie fue un rival digno y resistente que no claudicó con la primera estocada de Carlos en forma de break. El británico continuó remando y encontró una ventana para igualar cuando se acercaba el momento de cierre del parcial. Llegaba la rotura del británico, pero repetimos, era el día de Alcaraz y el murciano, un hombre en una misión, lograría el contrabreak para ponerse por delante en el set, ya de manera definitiva.
Alcaraz golpea, Norrie remonta
El ambiente cada vez era mejor, buena temperatura, acercándose el fin de semana y con el espectáculo asegurado para Alcaraz, que volvería a ver como Norrie se le subía a las barbas en el inicio del segundo set. El británico, de revés extraño pero efectivo y derecha más que competitiva, tiraba de galones para romper a un Carlos que volvía a repetir fórmula e igualaba de inmediato.
Se presumía un segundo set prolongado y así fue. Ninguno de los dos contendientes dio su brazo a torcer y llevaron la manga a la decisión en la muerte súbita, sabiendo que era imposible que resultara más emocionante que la del Nadal-Goffin pero conocedores de que sí podía ser decisiva. Para no faltar a la tradición, Carlitos empezó perdiendo y remontó, pero Norrie se llevó el gato al agua aprovechando la precipitación de un jugador que, no olvidemos, tiene 19 años recién cumplidos.
Carlos acelera para encontrarse con Nadal
La juventud le costó el set a Alcaraz pero también le hizo no pensarlo demasiado. Todo desparpajo, Carlitos quebraba de inicio en el tercer set, incluyendo en el cartel un punto mágico que levantó al público de sus asientos. La gente está encantada con su nuevo héroe, más potente que el anterior y que apunta a dotar de muchas tardes de gloria cuando Nadal ya no pueda más.
Por el momento, el objetivo mayor es ver un duelo entre ambos, aún con Rafa sin rodaje, y Carlos aceleró para hacerlo realidad. Norrie seguía trabajando y sin ceder más servicios que le alejaran del partido. El británico, además, tuvo un 0-40 a su favor que Alcaraz remontaría con una facilidad pasmosa para, acto seguido, lanzarse a pedir mayor apoyo si cabe a los presentes.
Un bote pronto de otro planeta, una dejada de revés y una derecha ganadora. El repertorio era demasiado incluso para un meritorio Norrie que, tras más de dos horas y media de durísima batalla, se rendía ante el talento del cumpleañero, ídolo de nuevo cuño y rival de Rafa Nadal en cuartos de final del Mutua Madrid Open.