Los vecinos del barrio madrileño de Moratalaz que cada tarde salen a la calle para exigir la dimisión del Gobierno no están dispuestos a que Podemos se apropie del aplauso a los sanitarios que han salvado miles de vidas durante la crisis del coronavirus.
Por este motivo, en su concentración de este viernes han exhibido una gran bandera de España en la que agradecen la labor desarrollada por los sanitarios, la Guardia Civil, la Policía y el Ejército.
Una vez más, han tenido enfrente a los jóvenes de la asociación Distrito 14, próxima a Podemos, que han intentado reventar la manifestación y han coreado gritos a favor de la «sanidad pública» (que deliberadamente no quieren hacer extensivos a los profesionales de la sanidad privada, que también han luchado contra el Covid-19 en las UCI durante semanas).
El apoyo a la «sanidad pública» es sólo el pretexto esgrimido por los miembros de Distrito 14, que en su convocatoria dejan claro que su objetivo prioritario es enfrentarse a los «fascistas». Es decir, a los trabajadores del barrio de Moratalaz que cada tarde salen a la calle con la bandera española, para exigir la dimisión del Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.
En la misma Avenida de Moratalaz, jóvenes presuntamente vinculados a la asociación Distrito 14 agredieron el miércoles a un taxista de 34 años, Alberto, que participaba en la cacerolada contra el Gobierno y que tuvo que ser atendido en el servicio de urgencias del Gregorio Marañón con contusiones múltiples en la cabeza. Alberto ha sido especialmente activo al trasladar gratis en su coche a los profesionales sanitarios durante la pandemia.