Carlos de Prada: «Las autoridades han fallado al proteger a la ciudadanía de los tóxicos alimentarios»
"La concentración segura de bisfenol A era 20.000 veces más alta de lo que ahora dicen las autoridades"
"La concentración segura de bisfenol A era 20.000 veces más alta de lo que ahora dicen las autoridades"
"La disrupción endocrina puede producirse a muy bajas concentraciones"
"Las autoridades están queriendo eliminar normativas que protegen la salud"

Una entrevista con Carlos de Prada siempre se quedará corta, sobre todo si hablamos de su nuevo libro en el que multitud de temas se amontonan en un mundo tan complejo como el de los tóxicos en la alimentación.
Resumir en poco más de 30 minutos de conversación las más de 700 páginas de esta acreditada guía para sortear los tóxicos que llegan a nuestras mesas puede ser complicado.
Aun así, es interesante escuchar en esta entrevista a uno de los mayores expertos sobre contaminación tóxica que tenemos en España y Europa. Un privilegio invitar al plató de OKDIARIO a este periodista ambiental, Premio Global 500 de la ONU, Premio Nacional de Medio Ambiente, y director de Hogar sin tóxicos.
Principal vía de exposición
De Prada advierte en su nuevo libro que la alimentación es la principal vía de exposición humana a sustancias químicas preocupantes y critica los retrocesos normativos en la UE.
La alimentación se ha convertido en la principal puerta de entrada al organismo humano de multitud de sustancias tóxicas que preocupan a la comunidad científica.
Así lo advierte Carlos de Prada en su nuevo libro Cómo comer sano en un mundo tóxico (Ediciones i, 2025), una obra en formato guía comprensible para todos los interesados en este tema, que recopila evidencias científicas sobre la presencia de contaminantes en los alimentos y cómo reducir la exposición a ellos.

«Hay que tener presente que lo que nos dice la comunidad científica a través de miles de investigaciones es que la alimentación es precisamente la principal vía por la que llegan al cuerpo humano muchas de las sustancias tóxicas que más preocupan a los científicos», explica De Prada en esta entrevista con OKGREEN.
El experto señala que entre estos contaminantes se encuentran residuos de pesticidas, compuestos orgánicos persistentes, sustancias que migran desde materiales en contacto con alimentos y algunos aditivos alimentarios.
El problema de la disrupción endocrina
Uno de los efectos más preocupantes de estas sustancias es la disrupción endocrina, es decir, la alteración del equilibrio hormonal del organismo que puede producirse a muy bajas concentraciones. «La disrupción endocrina ha sido asociada a un mayor riesgo de algunos tumores, problemas en el desarrollo sexual, infertilidad, problemas inmunológicos y también en el desarrollo cognitivo de los niños», detalla De Prada.
El experto subraya que la exposición a estas sustancias no implica necesariamente que se vaya a producir un efecto, pero los estudios científicos muestran un incremento del riesgo. «Es mejor aplicar un principio de precaución que lleve a reducir todo lo que se pueda la exposición a estas sustancias, y a veces conseguirlo no es demasiado difícil», añade.
Lo legal no es lo seguro
Una de las revelaciones más impactantes del libro es la brecha entre lo que las autoridades consideran «seguro» y lo que realmente protege la salud. «Lo legal y lo seguro son conceptos que a veces no van parejos en absoluto», afirma De Prada, quien pone como ejemplo el caso del bisfenol A presente en latas de comida: «La concentración que hasta hace poco se afirmaba que era segura oficialmente era 20.000 veces más alta que la que ahora nos dicen».

El autor critica duramente los retrocesos normativos en la Unión Europea: «Las autoridades están queriendo desregular, están queriendo eliminar o privar de eficacia a normativas muy importantes que protegen la salud de los ciudadanos. Esas cosas me enojan y me animan a batallar».
Soluciones al alcance del consumidor
Durante la entrevista, OKGREEN pidió a De Prada que analizara varios productos comprados en el supermercado. Su veredicto fue claro: la alimentación ecológica es la mejor opción para reducir la exposición a pesticidas. «Si en un sistema de producción agrario no se emplean estos pesticidas, es mucho más difícil que luego estén presentes como residuos en los alimentos», explica.
Sin embargo, el experto reconoce que no es posible eliminar completamente la exposición: «Reducir es el verbo adecuado porque en el mundo en el que vivimos hoy es imposible eliminar toda la exposición a sustancias tóxicas. Están en todas partes». Aun así, insiste en que «con la información necesaria es fácil tomar medidas sencillas para reducir bastante esa exposición».
De Prada concluye con un mensaje esperanzador: «La conciencia es el motor de la acción. Jamás es mejor no saber. Siempre es mejor saber». Su libro aspira a convertirse en una guía preventiva que permita a los ciudadanos autoprotegerse mediante decisiones de consumo bien informadas en un mundo donde, según denuncia, «las autoridades en alguna medida han fallado a la hora de proteger a la ciudadanía».