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Roures responde con una pataleta a su ‘despido’ en Italia: reclama ahora 200 millones a los clubes

Pablo Iglesias y Jaume Roures.
Pablo Iglesias y Jaume Roures.
Carlos Ribagorda

El hasta ahora ruinoso periplo en Italia de Jaume Roures y Tatxo Benet, gestores de Mediapro, tiene un nuevo capítulo. Congelada por los clubes italianos su oferta de 3.300 millones de euros por los derechos de emisión de televisión de la liga de fútbol para los años 2018-2021, Roures ha respondido con lo que en Italia consideran una pataleta: reclamar en un juzgado 200 millones de euros a la Serie A alegando daños a la imagen patrimonial de la productora.

De esta forma, Roures y Benet parecen dar por perdida definitivamente la batalla con los clubes italianos, que no han respondido a la oferta de Mediapro antes del 30 de noviembre, fecha límite establecida por la productora. Solo cuando el contrato parece perdido, Mediapro ha pasado al contraataque.

Es la respuesta de la productora -ahora de mayoría capital chino- a la negativa en principio definitiva de los clubes a aceptar su oferta y al cruce de demandas entre las dos partes que dura ya varios meses.

Todo empezó en el anterior contrato de derechos de televisión, el referido a las temporadas 2018-2021, que fue adjudicado en un primer momento a Mediapro y que le fue retirado posteriormente después de que un juzgado italiano diera la razón a la demanda de impugnación de esa adjudicación que hizo su rival, Sky -que fue el adjudicatario final junto a DAZN de ese contrato tras el nuevo concurso-.

Tras ese episodio, Roures reclamó a la Liga la devolución de los 64 millones de euros que puso como aval para entrar en el concurso, mientras que los clubes de fútbol italianos respondieron exigiendo a Mediapro 450 millones de euros en concepto de daños y perjuicios: sería la diferencia entre lo que ofrecieron los españoles en el anterior concurso y lo que realmente recaudaron de Sky y DAZN.

Daño patrimonial

La reclamación de Mediapro, según ha publicado la prensa local, se basa en el supuesto daño a la imagen patrimonial de la productora por las dudas aireadas por los clubes sobre la situación financiera de la compañía. Dudas que también llegaron incluso a Francia, donde Mediapro también ha pujado por los derechos de televisión de la liga francesa.

En Italia consideran que esta decisión de Mediapro es una forma de presionar a la Liga para negociar un acuerdo definitivo.

Las tribulaciones de Mediapro en Italia y Francia -donde ha puesto en marcha un canal de pago para emitir la próxima temporada ocho partidos de primera división entre las dudas en el país sobre su futuro- se añaden a la pérdida de estos derechos también en España, donde no ha podido con la fortaleza de Telefónica. A cambio, acaba de ganar los derechos en Canadá para retransmitir hasta 13 torneos de selecciones locales.

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