El alimento milagroso mejor que el yogur que no comemos en España y recomiendan los expertos

El cuidado de la salud empieza por el cuidado de la alimentación. Y dentro de la alimentación, hay un aspecto que cada vez cobra más importancia: el cuidado de la microbiota intestinal, el conjunto de microorganismos que habitan en nuestro aparato digestivo y que influyen en nuestra inmunidad, metabolismo y estado de ánimo. Para cuidar nuestra microbiota, necesitamos consumir alimentos que contengan prebióticos, que son sustancias que estimulan el crecimiento y la actividad de las bacterias beneficiosas. Y aquí es donde entra en juego el alimento del que te vamos a hablar hoy: el alimento milagroso que tiene más prebióticos que el yogur y que no consumimos lo suficiente en España.

El alimento con más prebióticos que consumimos poco en España

Cuando hablamos del cuidado de la microbiota intestinal, siempre entran en juego los probióticos, las bacterias que son buenas para nuestro organismo (presentes en muchas frutas, verduras y lácteos), y también los prebióticos que son son sustancias que no se digieren ni se absorben en el estómago o el intestino delgado, sino que llegan al colon, donde son fermentadas por esas bacterias beneficiosas que forman parte de la microbiota intestinal.

Y entre los alimentos con más prebióticos suele mencionarse siempre el yogur o el kéfir, pero lo cierto es que existe un alimento que contiene más prebióticos y que pocos conocen: el diente de león.

El diente de león es el alimento con más prebióticos

El diente de león es una planta silvestre que crece en prados, campos y jardines, y que suele pasar desapercibida o considerarse una mala hierba. Sin embargo, esta planta tiene muchas propiedades beneficiosas para la salud, especialmente para la microbiota intestinal, que es de vital importancia en nuestra salud ya que influye en nuestra inmunidad, metabolismo y estado de ánimo.

Los prebióticos del diente de león se encuentran principalmente en la raíz, que contiene oligofructanos, un tipo de fibra soluble. Los oligofructanos actúan como fuente de carbono y energía para las bacterias intestinales, favoreciendo su proliferación y diversidad.

Los prebióticos del diente de león tienen múltiples efectos positivos para la salud, como:

• Mejorar la digestión y el tránsito intestinal, previniendo el estreñimiento y la diarrea.
• Fortalecer el sistema inmunitario, al aumentar la producción de anticuerpos y regular la inflamación4.
• Proteger la mucosa intestinal, al impedir la adhesión de patógenos y toxinas.
• Regular los niveles de glucosa e insulina en sangre, al mejorar la sensibilidad a la insulina y reducir la absorción de azúcares.
• Prevenir o tratar el sobrepeso y la obesidad, al aumentar la saciedad y el gasto energético.

El diente de león también es una fuente de otros nutrientes importantes, como vitaminas (A, C, E, K y del grupo B), minerales (potasio, calcio, hierro, magnesio y zinc), antioxidantes (flavonoides, carotenoides y fenoles) y otros compuestos bioactivos (ácidos orgánicos, taninos y saponinas) con las que podemos depurar el organismo, prevenir infecciones e incluso depurar el organismo.

¿Cómo consumir el diente de león?

El diente de león se puede consumir de diferentes formas, según la parte de la planta que se utilice. Las hojas se pueden comer crudas o cocidas, como si fueran espinacas o acelgas. Las flores se pueden añadir a ensaladas, infusiones o mermeladas. La raíz se puede rallar o moler para preparar infusiones, cafés o condimentos.

El diente de león también se puede encontrar en forma de suplementos alimenticios, como cápsulas, extractos o tinturas. Estos productos se pueden adquirir en herbolarios, farmacias o tiendas online. Es importante seguir las indicaciones del fabricante o del profesional sanitario sobre la dosis y la duración del tratamiento.