COMUNIDAD VALENCIANA

El PP de Mazón contra el hachazo de Ribó en las plusvalías: exige reducirlo un 10% en Valencia

FEIJÓO
María José Catalá, con Feijóo y Mazón, en Valencia, las pasadas Fallas.
Ignacio Martínez

El Partido Popular en el Ayuntamiento de Valencia ha exigido al alcalde de la ciudad, el nacionalista Joan Ribó (Compromís), reducir un 10% el coeficiente del impuesto de plusvalías en todos sus tramos. Sostiene que, actualmente, Valencia tiene este gravamen casi al máximo permitido por la ley, en un 29,7% del coeficiente y que, por tanto, existe sobrado margen de rebaja. Reclama, también, que se bonifique el impuesto al máximo en los casos de herencias, violencia de género y fallecidos por covid. El impuesto municipal de plusvalías de Valencia, según los populares, es el que más queja de los ciudadanos recibe: 2.700 sólo en 2021.

El objetivo del PP valenciano con esta iniciativa es reducir la carga fiscal que sufren las familias frente a los continuos hachazos en materia impositiva a los que les somete también el Ejecutivo autonómico, que preside el socialista Ximo Puig, y el Gobierno de España, encabezado por su presidente, el también socialista Pedro Sánchez.

La iniciativa del PP llega en un momento en que las grandes corporaciones locales prevén una caída de la recaudación del 25% en el Impuesto sobre el Incremento del Valor de Terrenos de Naturaleza Urbana, lo que se conoce como impuesto de plusvalías, debido a la reciente reforma de este tributo, tal como adelantó ayer OK DIARIO. El pasado marzo, fue el Ayuntamiento de Palma, gobernado por el socialista José Hila, el que ejecutó esa subida, con un incremento de 40% del impuesto, pero detrás vendrán más.

La previsión del descenso de recaudación ha sido realizada por 24 corporaciones locales y trasladada a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF). Entre ellos, los 16 ayuntamientos con una población superior a los 250.000 habitantes, entre los que se encuentra Valencia.

Frente a todo ello, el PP de Valencia, a través de su portavoz municipal María José Catalá, sostiene que el impuesto de plusvalías es «tremendamente injusto» y que el Ayuntamiento de Valencia ya aplica un tipo de gravamen (29,7%) muy próximo al máximo establecido por la Ley Reguladora de Haciendas Locales (30%). Sostiene que frente a todo ello, la prioridad no debe ser el incremento de la recaudación sino «dar oxígeno a las familias» frente a «una inflación desbocada».

La posición del PP de Valencia se alinea con la reiterada en varias ocasiones por su presidente regional, el alicantino Carlos Mazón, que lleva desde el pasado verano insistiendo en la necesidad de una bajada general de impuestos en la autonomía, dirigida sobre todo a las rentas más bajas, y con el objeto de reactivar la economía y el empleo y aliviar la carga que padecen familias, autónomos y pequeñas y medianas empresas (pymes). Y engarza también con la línea del presidente nacional de la formación, el gallego Alberto Núñez Feijóo, que hace menos de 24 horas arremetió contra Sánchez por no bajar los impuestos a pesar de que la inflación, tal como también ha sostenido Catalá, se encuentra cercana al 10%.

La reforma del impuesto municipal de plusvalías fue aprobada el pasado noviembre por el Gobierno de Sánchez y ha levantado una gran polémica, tanto entre los contribuyentes como entre los expertos en fiscalidad, que sostenían entonces, tal como publicó OK DIARIO, también, que mantenía algunos aspectos que podían derivar en su inconstitucionalidad y recomendaban recurrir con el fin de que si el impuesto resultaba finalmente anulado se pudieran anular también sus plusvalías.

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