El abogado de Griñán pide que no entre en prisión para no «reducir su expectativa de vida»
La defensa del ex presidente de la Junta de Andalucía, el socialista José Antonio Griñán, ha reiterado a la Audiencia de Sevilla que suspenda su ingreso en prisión dada su grave enfermedad sobrevenida, un cáncer de próstata, ya que entrar en la cárcel «podría reducir su expectativa de vida», según su abogado.
El ex presidente andaluz, condenado a seis años y dos días de prisión por prevaricación y malversación en el caso ERE, anunció la pasada semana, horas después de conocerse que debía ingresar voluntariamente en prisión en un plazo de diez días, que le había sido diagnosticado un cáncer de «alto riesgo», alegando dicha enfermedad para eludir el cumplimiento de su pena privativa de libertad. Necesita, según esgrime, un tratamiento hospitalario de forma urgente para frenar su expansión. Cabe señalar que en ninguno de los recursos interpuestos anteriormente mencionó tal enfermedad, y sólo lo ha hecho cuando la Audiencia de Sevilla ha dictado su ingreso en un centro penitenciario, plazo que finaliza este domingo 1 de enero.
Así las cosas, la defensa de Griñán ha solicitado a la Audiencia la suspensión extraordinaria del citado plazo para su entrada en la cárcel, en aplicación del artículo 80.4 del Código Penal, que dispone que los jueces y tribunales podrán otorgar la suspensión de cualquier pena impuesta sin sujeción a requisito alguno en el caso de que el penado esté aquejado de una enfermedad muy grave con padecimientos incurables.
La Audiencia ha ordenado que un forense del Instituto de Medicina Legal (IML) de Sevilla examine la documentación y haga un reconocimiento a Griñán si fuera necesario para que emita un informe «valorando si el ingreso en centro penitenciario pudiera tener incidencia en el desarrollo de la enfermedad o en el tratamiento prescrito».
En un escrito presentado este mismo jueves y dirigido a la Sección Primera de la Audiencia, recogido por Diario de Sevilla, el abogado José María Calero sostiene que los informes médicos aportados para su examen forense acreditan que el riesgo de que el ingreso en prisión de Griñán incida en su enfermedad es «cierto».
«El inevitable impacto que tendría en mi mandante el ingreso en un centro penitenciario incrementaría el riesgo de fracaso del tratamiento iniciado, dificultaría su control por especialistas en onco-urología y podría reducir su expectativa de vida, lo que justifica la concesión de la suspensión extraordinaria solicitada», afirma el abogado de Griñán.
La defensa señala también que el ex presidente de la Junta comenzó este pasado miércoles, 28 de diciembre, el tratamiento contra su cáncer de próstata.
Aguayo, primera en entrar en prisión
Este mismo jueves, la que fuera consejera de Hacienda de la Junta, Carmen Martínez Aguayo, ha sido la primera condenada por el caso ERE que ingresa en prisión en el plazo dictado por la Audiencia de Sevilla. Aguayo, que permaneció en el cargo entre 2009 y 2013, con Griñán al frente del Ejecutivo andaluz, fue sentenciada a seis años y dos días de cárcel y a 15 años de inhabilitación por prevaricación y malversación.
La ex consejera andaluza ingresó este miércoles en la prisión de mujeres de Alcalá de Guadaíra, en Sevilla, y ha pasado ya su primera noche en el centro penitenciario sin esperar a apurar el plazo fijado por los tribunales. Aguayo es la única mujer condenada por los expedientes de regulación de empleo (ERE) fraudulentos incentivados por la Junta de Andalucía y las ayudas arbitrarias a empresas.
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