Receta de Fabada vegana: la versión cruelty free del clásico asturiano

La fabada es uno de los platos más tradicionales y reconocidos de la región de Asturias. Como el propio nombre sugiere, el ingrediente imprescindible en su preparación son las alubias o fabas (fabes en asturiano), pero la versión tradicional también incluye carne de cerdo y embutidos, como el chorizo o la morcilla.

A continuación, te presentamos una receta de fabada vegana para probar este clásico asturiano 100% libre de crueldad animal y apto para todos los comensales. ¿Te animas?

Ingredientes:

Elaboración:

1. En una olla grande, ponemos el aceite y sofreímos la cebolla, el tomate y los pimientos cortados con un poco de sal.
2. Cuando las verduras estén tiernas, agregamos la cúrcuma y el pimentón dulce y removemos constantemente durante unos dos o tres minutos para que no se quemen. Apagamos el fuego y trituramos todas las verduras con una batidora o mixer.
3. En seguida, agregamos a la olla las alubias previamente remojadas y escurridas, y cubrimos con la cantidad necesaria de agua o caldo de verduras. Añadimos también las hojas de laurel, tapamos la olla y dejamos que se cocine a fuego lento.
4. Después de unos 30 minutos de cocción, echamos agua fría (o caldo frío) para romper el hervor y “asustar” las fabas. Esta técnica nos ayuda a que salgan más tiernas y jugosas.
5. Seguimos la cocción a fuego lento hasta que las alubias estén completamente tiernas. Es muy importante poner atención a la cocción, pues puede ser necesario agregar más agua o caldo. De ser necesario, puedes repetir el paso anterior, agregando el liquido frío o a temperatura ambiente.
6. Cuando las fabas ya estén casi en su punto ideal, añadimos a la olla el seitán cortada en trozos. Si queremos que se vean más dorados y tengan mejor textura, podemos pasarlos por una sartén con un poco de aceite de oliva antes de sumarlos a la olla.
7. Después de agregar el seitán, esperamos a que nuestra fabada vegana se cocine por unos minutos más, apagamos el fuego y dejamos que repose antes de servirla.
8. Rectificamos el punto final de sal.

Un tip simple pero muy importante: siempre que utilices cualquier legumbre en tus preparaciones, intenta remojarlas por al menos 12 horas. Ello no solo acelera el proceso de cocción, sino que también las hace más fáciles de digerir.