Sánchez no apoyará a Rajoy y reconoce que va a plantear un pacto de Gobierno con Podemos
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha reiterado a Mariano Rajoy que no apoyará su continuidad al frente del Gobierno ni tampoco la del PP. El socialista ha anunciado que si el jefe del Ejecutivo en funciones no consigue formar Gobierno, “sería razonable que la segunda fuerza se ofreciera a liderar las negociaciones y tratara de optar a presidir el Congreso de los Diputados”.
Sánchez ha dicho a Rajoy que su partido «va a explorar todas las posibilidades para que haya un Gobierno de cambio”. «Dialogar con muchos partidos y no solo con dos» ha explicado. El socialista ha rechazado el ‘pacto a tres’ que propuso esta mañana el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, y señaló que agradece la oferta pero “no es tiempo de frentes, sino de dialogo entre todos”. El socialista ‘ dejó caer’ que “el acuerdo puede no ser a dos, sino con más fuerzas”.
Preguntado sobre la posibilidad de decirle “no” a Podemos, tal y como expresó la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, el secretario general ha respondido que comparte sus declaraciones pero “ella tiene cultura de partido y es la Ejecutiva Federal quien marca las líneas”. Con esto, el socialista deja abierta la posibilidad de dialogo con Pablo iglesias y contesta, con estas palabras veladas a la andaluza, que quien tiene que decidir con quien pacta es él y su Ejecutiva, no solo ella. Sánchez teme que ante unas nuevas elecciones no sea él quien lidere el cambio, por ello ha expresado de manera rotunda que la última opción para su partido son unas nuevas elecciones en mayo.
Sánchez enumeró una serie de medidas que pondrá encima de la mesa de cualquier negociación a modo de líneas rojas por las que no van a pasar. Entre ellas se encuentra: una recuperación económica que garantice un nuevo sistema fiscal que defienda a la clase media y trabajadora; un nuevo Estatuto de los Trabajadores; una transición energética; un gran pacto educativo por la ciencia y la cultura; reconstruir el Pacto de Toledo; un gran pacto social frente a la violencia de género y una gran reforma constitucional que “resuelva el conflicto en Cataluña”, anunció el socialista.
«El PSOE va a explorar todas las posibilidades para que haya un Gobierno de cambio y para que haya un Gobierno que dé estabilidad al país», pidiendo a todos los partidos «anteponer el interés general y no intereses partidistas”.
«Quiero dar mandato y cumplimiento al voto de los españoles el pasado domingo, que dijeron en las urnas que querían cambiar al Gobierno de España y tener un Ejecutivo progresista presidido por el diálogo que estos últimos cuatro años ha faltado”, indicó en referencia al Gobierno de Rajoy.
El socialista aseguró que Rajoy no le pudo ofrecer nada a cambio, como otros diarios han asegurado, porque fue “claro desde el primer minuto. Le dije nada más entrar que no le íbamos a apoyar”, desveló el líder del PSOE.
Sánchez sabe de primera mano que su voto o abstención es fundamental para el resto de formaciones, en especial para el PP y sería la forma más clara para conformar Gobierno. Sin embargo, también sabe que eligiendo estas opciones traicionaría a su electorado permitiendo la continuidad de su enemigo, el Partido Popular, y costaría más defender su liderazgo en el próximo Congreso del partido, donde ya dejó claro que volvería a presentarse para la reelección.
El socialista insistió varias veces en la figura de Mariano Rajoy y no darle el Gobierno a él. “El no a Rajoy es el sí al cambio”, ha dicho. Sin embargo, otras lecturas dentro del PSOE verían un cambio factible si Rajoy no fuera el nuevo presidente.
Rajoy se reunirá el lunes con el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, tal como ha anunciado en Twitter. «Le explicaré nuestra propuesta de país que no es compatible con que el PP siga gobernando». Ese mismo lunes, Rajoy también se verá con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera.