Marlaska ordena un «control» extra de las calles para evitar protestas contra Sánchez en la hora del deporte
A todos los agentes se les ha comunicado la prohibición expresa de manifestaciones en las calles
Coronavirus: última hora en directo del Covid-19 y la desescalada
El Gobierno asegura que no ha dado ninguna instrucción a la Policía para controlar las protestas nacientes en las calles que piden la dimisión de Pedro Sánchez. Pero lo cierto es que el Plan de Desescalada Covid-19, remitido internamente a la Policía por la Dirección General del Cuerpo y al que ha tenido acceso OKDIARIO, sí recoge una orden de presencia extra de dotación policial y una actitud especialmente activa de los policías en las calles en las horas destinadas a hacer deporte. Justo las que coinciden con las caceroladas contra el Gobierno que se celebran a las 21:00 horas de cada noche.
La orden pide un refuerzo extra. Y a todos los agentes se les ha comunicado igualmente la prohibición expresa de manifestaciones en las calles. Ambas instrucciones unidas implican que esos grupos reforzados de agentes no tienen más remedio que actuar frente a cualquier indicio de un posible foco de manifestación. Justo lo que busca Sánchez para disuadir de las protestas en las calles.
El documento del citado plan policial interno recoge ese reforzamiento policial tanto para la fase 1 como para la fase 2. Es decir, que se extiende, en principio, hasta el 8 de junio, algo tremendamente exagerado a la vista de la permisividad normativa con, por ejemplo, los conciertos musicales de hasta 200 personas, ya autorizados en las zonas en fase 1.
El Plan de Desescalada Covid-19 detalla la «operatividad policial» ante cada situación. Y lo hace detallando el comportamiento de los agentes ante cada párrafo de las normas de desescalada aprobadas por el Gobierno de Pedro Sánchez.
Deporte
Allí se pueden leer las órdenes de actuación de los agentes ante el «deporte no profesional». Es decir, por ejemplo, el que realizan muchos ciudadanos en las horas a las que se permite a la gente salir a la calle para hacer ejercicio. Y esas horas coinciden con las caceroladas anti Sánchez que tanto molestan al Gobierno.
En ese apartado se destaca la diferente actuación de la Policía cuando se trata de «espacios públicos autorizados para practicar deporte» -como los polideportivos o canchas deportivas en los parques-, y cuando el deporte se realiza en la calle: «Espacios donde no está autorizada la práctica deportiva». No está prohibida, pero no son zonas puramente deportivas.
De ese modo, si en las zonas deportivas los agentes de la Policía se tienen que limitar a «vigilar», en las calles la orden se refuerza y pasa a ser de «control».
La diferencia es abismal, como confirma un mando policial a OKDIARIO: «Vigilar implica una menor dotación de efectivos y, además y muy importante, una diferente actitud de los agentes. En la vigilancia simplemente hay que estar atentos por si ocurre algo. En el control hay que anticiparse para evitar que ocurra un ilícito. Y eso implica muchas veces interpelar a los ciudadanos si llevan algún elemento que pueda hacer pensar que acuden, por ejemplo, a una manifestación no comunicada».
Evidentemente, el ministerio no ha dado el paso expreso de exigir actuar contra la gente que porta banderas. Básicamente porque la orden sería ilegal. Pero sí ha hecho todo lo posible para que los agentes de Policía tengan que interpelar en caso de que observen gestos que puedan ser indiciarios de una manifestación.
Orden interna
Esa orden interna -ahora desvelada por OKDIARIO- es la que está provocando incidentes como los vividos en los últimos días. Como el del pasado domingo en varias calles de Madrid, donde una multitudinaria e intensa cacerolada que protestaba contra el Ejecutivo de Sánchez y su gestión de Gobierno en la actual crisis del coronavirus se vio controlada por numerosos efectivos policiales.
Allí, un hilo en redes sociales narraba que «la Policía Nacional ha bloqueado varias calles en Madrid porque había una cacerolada y la gente gritaba «Gobierno dimisión». Los policías han cortado el paso a los vehículos y han tomado datos a varios ciudadanos. (…) También han tomado datos a alguno, no sé si para multarle o con qué fin. Es evidente que tienen miedo a que la protesta se generalice. Creo que deberíamos empezar a hacerlo en todas partes (…) Que sepan que así no nos van a parar. Esto también movilizará a la gente a la hora de votar. No podemos dejar que sigan avanzando y aplastando nuestro régimen de libertades».
La Policía Nacional boqueó, de hecho, varias calles en Madrid porque la gente gritaba «Gobierno dimisión». Y es que si recibe la orden de «control» para evitar manifestaciones, esa es la traducción directa en la práctica de lo ordenado a los agentes.