Telefónica garantiza a sus accionistas el pago de un dividendo de al menos 0,75 euros en los próximos 5 o 10 años
Los accionistas de Telefónica cobrarán un dividendo de al menos 0,75 euros durante los próximos 5 o 10 años, la misma cantidad que cobrarán este año. El presidente de la compañía, César Alierta ha confirmado que el pago se producirá aunque la venta de su filial británica O2 a Hutchinson – actualmente sometida a análisis por parte de la Comisión Europea- no salga adelante.
En una conferencia con analistas, Alierta ha explicado que si la operación no saliera adelante, podría pagarse parte en efectivo y parte en script dividend, aunque a su juicio, la probabilidad de que no se concluya la venta es «prácticamente ninguna».
Telefónica tuvo un beneficio neto de 2.745 millones en 2015, un 8,5% menos, lastrado por el impacto de las provisiones para su plan voluntario de suspensión de empleo en España
«No hay que preocuparse por el dividendo, en absoluto. Si hay un dividendo seguro, es el de Telefónica», ha insistido en la rueda de prensa posterior a la presentación de resultados.
El grupo Telefónica tuvo un beneficio neto de 2.745 millones de euros en 2015, un 8,5% menos, lastrado por el impacto de las provisiones para su plan voluntario de suspensión de empleo en España y el cambio de divisas, según ha informado hoy la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Los ingresos del ejercicio ascendieron 47.219 millones de euros, un 4% más que en 2014 en términos orgánicos (un 8,7% reportado), destacando el comportamiento de Telefónica Hispanoamérica, con un crecimiento del 10,1%, y Brasil, del 4,5%.
En España los ingresos cayeron en términos orgánicos un 2,1%. No obstante, si se incluye la compra de Digital+, la facturación crece un 3,2%.
Por áreas geográficas, España, Alemania y Brasil supusieron el 66% de los ingresos del año, mientras que Telefónica Hispanoamérica representó el 30%.
Menos beneficio por la reestructuración
Estos resultados han estado influidos por los costes de reestructuración de la compañía. En el cuarto trimestre el grupo hizo una provisión de 3.122 millones, en la que destaca los 2.896 millones para el plan voluntario de suspensión de empleo en España.
También ha sido determinante la depreciación de las divisas latinoamericanas frente al euro -especialmente el real brasileño, el bolívar venezolano, el peso colombiano y el peso argentino- en el cuarto trimestre.
Asimismo, se han producido otros impactos positivos como el acuerdo final relacionado con la compra de E-Plus Alemania (102 millones) o el resultado del intercambio de espectro en México (79 millones).
Excluyendo los impactos no recurrentes, el beneficio neto subyacente creció un 29,7% hasta los 5.787 millones, mientras que el resultado bruto antes de amortizaciones (oibda) creció en 2015 un 3,6% hasta los 11.414 millones.
La deuda financiera neta se situó en 49.921 millones de euros y creció en 4.834 millones. Entre los factores que aumentaron la deuda destaca los 6.934 millones en concepto de inversiones financieras netas, 4.188 millones en retribuciones al accionista, 1.307 millones en pagos de espectro y la ampliación de capital de Telefónica S.A. por 3.003 millones.