Tiene que liberar más de 200 millones para poder inscribir al argentino

Los malabares de Laporta con el límite salarial para poder renovar a Messi

El Barcelona tendrá que liberar más de 200 millones en conceptos de traspasos o rebajas salariales para poder inscribir a Messi en la Liga

El Barcelona ha llegado a un acuerdo para renovar a Messi bajándole el salario a la mitad pero está a la espera del ok definitivo de la Liga

Principio de acuerdo entre Messi y el Barcelona: se bajará el sueldo a la mitad

Este es el nuevo sueldo que ganará Messi con su renovación

messi barça
Los problemas del Barça para inscribir a Messi.
Pedro Antolinos

«¿Messi? El mensaje es de tranquilidad y paciencia. A veces hay que hacer juegos de malabares». Estas palabras salieron el pasado jueves de la boca de un Joan Laporta que es consciente que el culebrón de Messi va para largo. Porque una cosa es llegar a un acuerdo con el futbolista, que parece que está claro, y otra es tener el ok definitivo de la Liga para poder inscribir al futbolista de acuerdo con la normativa en lo que respecta al límite salarial. Y es que para que el ’10’ pueda jugar con el Barcelona en Liga el club culé necesita liberar más de 200 millones en conceptos de traspasos (algo prácticamente imposible) y en rebajas salariales.

Para comprender el gran problema que tiene el Barcelona para poder inscribir a Messi hay que tener claro lo que es el límite salarial. Según especifica la Liga en su web, este es incluye el gasto en jugadores, primer entrenador, segundo entrenador y preparador físico del primer equipo además del gasto en filiales, cantera y otras secciones. Es decir, esto establece cuánto dinero se puede gastar los equipos en pagar el coste de sus plantillas. De esta manera, los conceptos que se incluyen en el límite son: salarios fijos y variables, seguridad social, primas colectivas, gastos de adquisición (incluidas comisiones para agentes) y amortizaciones (importe de compra de los jugadores imputado anualmente en función del número de años de contrato del jugador).

Y, ¿cómo se calcula este límite? Muy sencillo. Este es igual a los ingresos que tiene el club, deducidos sus costes de estructura y repago de la deuda durante toda la temporada. Esto será el tope salarial. Lo que delata a un Barcelona cuya caída de ingresos por la pandemia ha sido más que drástica (tuvo pérdidas por valor de 100 millones en el primer año y dejó de ganar 300 por cerrar el Camp Nou al público). Hace dos veranos su límite era de 671 millones, lo que le permitía grandes desmanes a la hora de pagar salarios y en el verano de la 2020-2021 cayó hasta los 382 kilos.

Aún más cayó en el pasado mercado invernal cuando se fue a los 347. Su masa salarial representa ahora un 110 por ciento respecto a los ingresos y el fair play financiero fija el tope en un 70%. Una cantidad que obliga al Barcelona a desprenderse de futbolista de forma casi obligatoria. Y más si quiere dar cabida al megacontrato de Leo Messi. Porque aquí hay que hacer otro inciso. En lo que respecta al límite salarial, la entidad catalana sí podrá mantener a los jugadores que están en plantilla, pero no podrá inscribir a nuevos. Y ahí viene el problema con el argentino, ya que mantener su anterior contrato era inviable.

Tiene que liberar más de 200 millones

El anterior contrato de Messi, por el que el Barcelona pagaba alrededor de 150 millones brutos al año era imposible de encajar en el límite salarial del Barcelona pero el nuevo con la reducción de sueldo a la mitad también será difícil. Y es que al haber excedido el tope salarial en la pasada temporada, el Barcelona sólo puede pagar en fichajes, sueldos y amortizaciones una cuarta parte del beneficio neto de lo que libere con ahorro de salarios o ventas. Es decir, por cada euro que le pague a Messi en el nuevo contrato tendrá que ingresar cuatro. Y eso parece casi una utopía en un mercado de fichajes marcado por el poco gasto que están haciendo los equipos con la excepción de los clubes estados, que están volviendo a tirar la casa por la ventana.

Con el objetivo de poder dar cabida a Messi, el Barcelona ya ha hecho hueco en lo que respecta a los salarios con las salidas de Todibo, Konrad de la Fuente, Matheus Fernandes o ingresando 15 millones por la venta de Junior Firpo al Leeds United. El siguiente paso será intentar dar salida a jugadores como Umtiti, Pjanic o Coutinho, algo que también parece difícil a día de hoy vista la depreciación sufrida en los últimos tiempos por estos futbolistas que carecen de valor en el mercado. Una de las soluciones a corto plazo, y que casi supone una obligación si Laporta quiere convencer a Messi, será la de rebajar un 40% el sueldo a futbolistas como Busquets, Piqué o Jordi Alba. Sin esta rebaja será prácticamente imposible renovar a Messi.

La salida de Griezmann no es suficiente

La salida de Griezmann rumbo al Atlético de Madrid ayudaría para poder dar cabida a Messi en la plantilla del Barcelona pero no es suficiente. El francés cobra en el Barcelona alrededor 35 millones brutos, prácticamente un 50% más que Saúl en el Atlético de Madrid. De esta manera, en esta operación el conjunto culé se ahorraría la mitad en lo que respecta al límite salarial. Para cuadrar todo, al galo será tasado en alrededor de 70 millones, que es la cifra que aún reluce como amortización en las cuentas del Barcelona. Esto se entiende de forma sencilla, Griezmann costó en su día 120 millones que fueron fraccionados en cinco años. Teniendo en cuenta que ha militado dos en el Barcelona a 24 anuales, faltarían un total de 72 de su fichaje por amortizar.

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Griezmann, en un partido con el Barcelona. (AFP)

El regreso de Griezmann al Metropolitano, que se hará sí o sí independientemente del trueque con Saúl, alivia en cierta medida el límite salarial pero el Barcelona necesita más teniendo en cuenta que próximamente también tendrá que inscribir a jugadores como Depay, Agüero o Eric García, cuyo sueldos no son pecata minuta. Por ello, se presenta como imprescindible recortar los salarios de los jugadores más importantes del plantilla, cuajar alguna cesión (hay que recordar que los despidos no computan a la hora de reducir el límite) o sacarse de la manga algún traspaso aunque parezca utópico como el de Dembélé.

Tebas no hará la vista gorda

El límite salarial es una medida impuesta por Javier Tebas que entró en vigor el pasado 2013 con el objetivo de hacer de la Liga una competición más equitativa y por ello el patrón no hará la vista gorda en lo que respecta a la renovación de Leo Messi. Y además ya lo ha ido avisando en las últimas semanas. «No haré la vista gorda con el límite salarial para inscribirlo», dijo hace unos días en una entrevista en el canal de Youtube de Ramón Álvarez de Món.

Días antes había dejado dudas sobre la inscripción de Messi en la Liga y dejó una frase clara y evidente. «Una cosa es pasarse el límite salarial y otra que puedan incorporar o renovar jugadores con la regla del 1×4, cada cuatro euros que ahorran, un euro pueden incorporarlo», aseguró. «Si no hay salidas, es imposible», sentenció Tebas sobre una renovación de Messi que sigue siendo un dolor para un Laporta que sigue haciendo malabares para cumplir con su promesa.

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