Receta de crema de guisantes a la menta
Prueba esta deliciosa crema de guisantes a la menta. Descubre la increíble combinación de sabores que esta receta tiene.
La crema de guisantes a la menta es suave, delicada y muy sabrosa para disfrutar como cena ligera. Con pocos ingredientes se puede lograr un plato especial, lleno de sabor y cuya receta tiene siglos de historia. En Finlandia es tradición comer un potaje de guisantes los días jueves, esto viene desde tiempos antiguos, cuando respetar la Cuaresma era ley. Una rica crema de guisantes, acompañada de una tostada de pan de centeno con mantequilla, es el plato más típico que se puede encontrar en esas tierras. Aunque simple y económica esta receta se hizo famosa en toda Europa. Al probarla nos damos cuenta el porqué, no solo es rica, es espesa, pero no pesada, y muy versátil.
Una porción de crema de guisantes a la menta es lo que se necesita para reponer energías. Los guisantes son fuente de proteínas vegetales de alta calidad, que el organismo utiliza para realizar todas sus funciones, además de fortalecer los músculos. También son ricos en vitaminas, minerales y fibra. En especial, contiene ácido fólico, recomendado para mujeres en gestación, pues ayudan a formar el sistema nervioso del bebé. Siempre es bueno incorporar cremas y sopas a la dieta, es una manera sencilla de aprovechar los nutrientes de los vegetales y legumbres.
Ingredientes:
Cómo preparar crema de guisantes a la menta:
- Calentar una cazuela con un poco de aceite.
- Picar la cebolla y el ajo. Sofreír hasta que estén tiernos.
- Agregar la patata troceada, los guisantes y la menta picada.
- Salpimentar al gusto y remover. Dejar cocinar durante cinco minutos.
- Verter el caldo caliente. Cuando la patata y los guisantes estén tiernos, añadir la nata.
- Cocer todo junto hasta que rompa el hervor.
- Retirar del fuego, incorporar la mantequilla. remover para integrar.
- Pasar la preparación por la licuadora o batidora hasta obtener una crema. Si se desea, pasar la crema por el colador para retirar la piel de los guisantes.
- Servir la crema de guisantes a la menta bien caliente, decorando cada plato con hojas de menta fresca, picatostes y jamón ibérico cortado en juliana fina.
Si te sobra un poco de crema de guisantes a la menta puedes congelarla y disfrutarla otro día ¡A tu familia le va a encantar!
