rtve ha recurrido la resolución

La Inspección de Trabajo resuelve que el contrato de Silvia Intxaurrondo en RTVE es irregular

Determina que RTVE debe dar de alta a Silvia Intxaurrondo en la Seguridad Social y no contratarla a través de su sociedad

Silvia Intxaurrondo
Silvia Intxaurrondo, periodista.
Carlos Ribagorda

Inspección de Trabajo ha resuelto, tras una investigación sobre la forma en la que RTVE ha contratado a Silvia Intxaurrondo, codirectora y copresentadora del programa matinal La hora de la 1, que debe ser la propia cadena pública quién dé de alta a la periodista en la Seguridad Social, por lo que contratarla a través de su sociedad mercantil, Sukun Comunicación, es irregular. La asesoría jurídica de RTVE ha recurrido la resolución de la Inspección de Trabajo.

La cadena pública que preside José Pablo López desde finales de 2024 renovó el contrato a Silvia Intxaurrondo en el verano de 2023 a través de su sociedad mercantil, Sukun Comunicación. Anteriormente tenía contrato en RTVE -llegó en 2021- a través de otra sociedad suya -y de su pareja, Farouk Jhinaoui-, llamada Ugarit & Babel, ya dada de baja.

La Inspección de Trabajo inició la investigación sobre la fórmula utilizada para contratar a la periodista en la cadena pública después de una denuncia anónima a finales de 2024 al considerar que se trataba de una falsa autónoma. Muchos son los casos de autónomos que son contratados a través de sus sociedades mercantiles por las empresas ya que, según expertos consultados, pagan menos impuestos a Hacienda.

De acuerdo con las fuentes consultadas, la primera resolución de Trabajo obliga a RTVE a dar de alta a Silvia Intxaurrondo en la Seguridad Social, lo que le obliga a buscar otra manera de contratar a la periodista y acabar con la polémica fórmula actual a través de Sukun Comunicación.

Aunque RTVE ha recurrido la resolución, si finalmente la Inspección de Trabajo rechaza el recurso la cadena pública tiene un problema encima de la mesa ya que será complicado convertirla en personal de plantilla dado que los sueldos de los trabajadores de la casa están lejos de lo que cobra la periodista.

Silvia Intxaurrondo
José Luis Rodríguez Zapatero, en unas jornadas con Silvia Intxaurrondo.

Como publicó este diario, Silvia Intxaurrondo firmó en el verano de 2023 un contrato con RTVE por dos años en el que cobraba hasta 537.000 euros distribuidos entre su trabajo como copresentadora del programa y como codirectora: «Como codirectora del programa por un periodo de 11 meses anuales por importe de 7.887 euros mensuales en los que están incluidas el disfrute de sus vacaciones. Como presentadora solo percibirá el importe de las intervenciones que realice previa certificación del productor, el importe por cada presentación es de 700 euros por capítulo», decía RTVE en documentos internos.

El contrato de la periodista va desde el 11 de septiembre de 2023 hasta el 10 de septiembre de 2025. De momento, no ha sido renovada por parte de RTVE, que está pendiente del recurso interpuesto contra la resolución de la Inspección de Trabajo.

Los actuales problemas de Silvia Intxaurrondo en RTVE no son nuevos. Ya ocurrió lo mismo en Telemadrid, donde también estaba contratada a través de su sociedad mercantil, en este caso Ugarit & Babel. La Inspección de Trabajo determinó en su investigación que la situación laboral de la periodista era irregular y obligó a que la cadena pública madrileña la diera de alta.

Como publicó este diario, tras la resolución de Trabajo Intxaurrondo empezó a cobrar con una nómina, como el resto de sus compañeros, y Telemadrid era quien le dio de alta en la Seguridad Social.

Fuentes internas de la cadena, críticas con la periodista por su defensa a ultranza del Gobierno de Pedro Sánchez, advierten que lo ocurrido con su situación laboral es el preludio de lo que puede pasar con su situación fiscal.

Como publicó este diario, la sociedad de Silvia Intxaurrondo ha declarado pérdidas de 976 euros en 2023, año que ya estaba contratada por RTVE desde el 11 de septiembre. Declarar esas pérdidas le dio derecho a no abonar nada por el Impuesto de Sociedades.

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