La vía Puigdemont para hacer descarrilar a Sánchez: convocar elecciones antes de la investidura
Ante el juicio contra Quim Torra, que puede provocar su inhabilitación, el ex presidente explora desde Waterloo una convocatoria electoral para no dejar el reloj político en manos del TSJC.
El escenario de elecciones anticipadas en Cataluña vuelve a sobrevolar en el Parlament. Hasta antes del 10-N lo reclamaba ERC, conscientes de que podrían ser los más beneficiados pero ahora, tras los resultados, Carles Puigdemont también valora esta posibilidad. Fuentes cercanas al ex presidente afirman que con este movimiento impedirían al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña tener el control de la agenda política y a la vez descarrilar la investidura de Pedro Sánchez, poniendo en una tesitura difícil a ERC.
El TSJC juzgará a Quim Torra por un delito de desobediencia el próximo 18 de noviembre. A partir de ese momento los tribunales tomarán el control de la política catalana ya que, de condenar a Torra, provocarán su inhabilitación como cargo público, dejando la presidencia temporalmente en manos de ERC y del actual vicepresidente, Pere Aragonès, algo que no es del agrado de Junts per Catalunya.
Con ERC habiendo perdido dos diputados en las últimas elecciones y JxCAT sumando un nuevo representante, Puigdemont cree que ahora es el momento de recuperar la iniciativa política y de que Torra haga uso de la potestad del president de disolver la Cámara catalana fijando así una fecha para la celebración de elecciones anticipadas. Unos comicios que se situarían en el mes de marzo.
Más allá de capitalizar el voto separatista, vendiendo la convocatoria como una respuesta al Tribunal Supremo y un movimiento para retener el control político de la cámara, si Torra disuelve el Parlament a principios de diciembre dejaría en una posición muy complicada a ERC respecto al voto en la investidura de Sánchez.
Con JxCAT y la CUP en contra de facilitar la formación de un Gobierno presidido por el PSOE, a quienes acusan de ser los responsables «de la represión», abstenerse en el debate de investidura agravaría aún más la pérdida de apoyos que experimentaron en las elecciones del pasado domingo. Su flirteo con el apoyo en el mes de julio les costó una importante fuga de votos a la CUP.
El TJUE
A todo esto, en paralelo a la investidura de Pedro Sánchez, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea decidirá sobre la inmunidad o no de Oriol Junqueras por su condición de euro diputado. Si el TJUE se alinea con su abogado general, que esta semana aseguró que se le debe considerar diputado desde el 26 de mayo y por tanto que tiene inmunidad, provocaría un terremoto en el tablero político.
El posicionamiento del TJUE no afectaría al proceso judicial con condena firme contra Junqueras pero si tendría afectación sobre Toni Comín y Carles Puigdemont, que se encuentran en la misma situación aunque en libertad al estar fugados. Si Estrasburgo les da la razón, Puigdemont podría volver a España sin poder ser detenido e incluso podría ser candidato a la presidencia de la Generalitat.
Los presupuestos
La aprobación, o no, de las cuentas de la Generalitat será clave también para la decisión final de Puigdemont y Torra. El primer pleno del mes de diciembre, antes del debate de investidura, debatirá los números para el 2020, después de haber tenido que prorrogar los del 2018. Si Torra no logra los apoyos necesarios, que a día de hoy no los tiene, afirman fuentes de JXCat que «no habría motivo para alargar la legislatura».