Laya dice que el líder del Polisario saldrá de España «cuando esté fuera de peligro»
La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, ha obviado las causas judiciales y ha asegurado que el líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, abandonará España «cuando esté fuera de peligro».
González Laya justifica esta postura en lo que viene a llamar una «diplomacia discreta» para resolver las «diferencias» con Marruecos. La jefa de la diplomacia española ha evitado revelar a preguntas de los medios los contactos que mantiene su Gobierno con los distintos actores implicados en esta crisis. «Tiene que ser así si queremos que la diplomacia sea efectiva», ha declarado en rueda de prensa junto a su homólogo húngaro, Peter Szijjart, que se encuentra de visita oficial.
El Gobierno sostiene que Ghali entró en España por un «situación médica de orden crítico», en alusión a los efectos de la Covid-19, y que por tanto no saldrá de España hasta que no haya acabado «la razón por la que está en nuestro país», después de que en los últimos días se especulase con una posible salida inminente para evitar la citación judicial del 1 de junio.
Fuentes del Polisario han confirmado que Ghali finalmente sí declarará de forma telemática ante la Audiencia Nacional en la fecha citada, algo sobre lo que Laya ha evitado hacer valoraciones porque se trata de «las relaciones entre un individuo y la justicia española». El Gobierno, ha recalcado, «respeta la independencia del poder judicial».
No obstante, acto seguido ha añadido: «Siempre daremos la bienvenida en términos genéricos al cumplimiento de las obligaciones de los ciudadanos para con la justicia».
Violación y torturas
El líder del Polisario tiene abiertas en estos momentos varias causas en la Audiencia Nacional, una por una presunta violación a una joven desvelada por OKDIARIO. Este periódico contó la historia de Yadiyetu Mohamaud, quien asevera que Ghali la violó cuando tenía 18 años. La joven asevera que «no soy la única, no soy la única, pero ten en cuenta que la sociedad hace mucho. Yo he visto a muchas niñas que han sido violadas. Y las violan dos, tres, cuatro veces; y no son capaces de denunciar simplemente por el hecho de que las van a mirar mal en la sociedad, o les van a faltar al respeto, nunca se van a casar».
Junto a esta querella, la Audiencia Nacional tiene reabiertas dos más. Una la de un bloguero marroquí, Fadel Breicaha, que acusa a Ghali de haberle secuestrado y torturado cuando estaba haciendo un reportaje en los campos de refugiados. La otra, la de la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos por los delitos de genocidio, torturas y desapariciones.
Esta última asociación solicitó al magistrado Santiago Pedraz el ingreso inmediato de Ghali en prisión, pero el juez lo rechazó. Este viernes, y ante la falta de cautelares, reiteraban «la necesidad imperiosa de poner bajo custodia policial a Brahim Ghali en el Hospital San Pedro de Logroño hasta que sea dado de alta y pueda declarar. La ausencia de medidas cautelares no hace sino aumentar el riesgo de fuga y la reiteración delictiva».
Además, también existe una cuarta querella, que investiga la Fiscalía, en la que se solicitaba que se actuara por la entrada con documentación falsa del líder del Frente Polisario en España. Esta denuncia entró por dos vías diferentes: por un lado dos personas la interpusieron en la Audiencia Nacional y, por otro, se presentó otra querella en un juzgado de Zaragoza.
Por último está la más ‘sangrante’ de todas, la denuncia de la Asociación Canaria de Víctimas del Terrorismo (Acavite), que presentó en la Sección Primera de la Audiencia Nacional en 2012, la petición de investigación de los numerosos secuestros, torturas y asesinatos que el Polisario y Ghali cometieron contra 281 marineros de origen canario. Una denuncia que ‘ha desaparecido’ o se ha ‘extraviado’ en algún cajón, puesto que nunca se tramitó como ha destapado OKDIARIO.