Cómo hacer un puf para los niños de forma fácil
Hacer un puf para los niños es un trabajo sencillo a partir del uso de un poco de tela y de relleno.
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El puf, además de ser un elemento de diseño que se adapta a muchos estilos diferentes de mobiliario, suele gustar mucho a los niños porque les permite tomar distintas posturas según el momento y la actividad que se realice. Veamos a continuación, cómo hacer un puf para los niños de forma fácil.
Cómo hacer un puf para los niños
La elección del modelo depende exclusivamente de tus gustos personales, ya que hay muchos en el mercado y todos prácticos y funcionales.
Desde los más sencillos con forma de almohada, que también se pueden transformar en una cama improvisada y con capacidad para más de una persona, hasta los más elaborados y decorativos, todos representan una excelente solución de decoración incluso para el dormitorio de los niños.
¿Qué tener en cuenta a la hora de comprar?
En primer lugar, es importante comprobar la calidad de los materiales y la seguridad de las costuras. Al tratarse de muebles destinados a niños, debemos asegurarnos de que el relleno no se salga por ninguna costura y que el material sea lo más natural y lavable a máquina posible.
Para estar seguro de los materiales utilizados y también ahorrar algo de dinero, siempre puede hacer un puf siguiendo este sencillo tutorial .
Materiales:
- Tela en lona de algodón resistente a bastante rigidez de 1m x 1,40m (las lonas de Ikea están bien y la elección de estampados es prácticamente infinita;
- 5 o 6 kg de cáscaras de espelta ecológica para el relleno, un material naturalmente rico en silicio con propiedades relajantes, pero también se pueden utilizar bolas de polipropileno como alternativa.
Pasos:
- Cose la tela del revés a lo largo del lado corto, de manera que puedas obtener una forma tubular abierta en ambos extremos. Para garantizar la seguridad de nuestro sillón, sometido a los no siempre delicados juegos de los niños, es recomendable hacer doble puntada con la máquina de coser y utilizar un hilo sintético, más resistente que el algodón.
- Manteniendo la tela del revés, posicionar la costura recién cosida en el centro y coser el borde inferior del puff.
- Siempre con la tela del revés, pero con la primera costura ahora de un lado, cose también el borde superior del puff, dejando unos 10-15 cm libres. De esta forma las dos costuras, inferior y superior, quedarán perpendiculares entre sí.
- Gira la tela en línea recta por el espacio que queda libre sin coser.
- Nuevamente para dar mayor fuerza a los puntos débiles que representan las costuras, repasar ambos bordes del puff con una segunda costura. También servirá para hacer más rígida la forma de la silla.
- Ahora tienes que llenar el saco que has creado con el material elegido. Si has decidido utilizar cáscaras de espelta, calcula que necesitarás unos 5 o 6 kg. En cualquier caso, la bolsa no debe estar completamente llena, de lo contrario no podrá adaptarse a las diversas posiciones que queramos darle.
- Para cerrar el puf basta con repasar la costura del margen que habíamos dejado abierta.
El puf, si se deja en manos de los niños, adoptará las formas más diversas: Simplemente apoyado en el suelo tomará la forma clásica de un puf, pero se puede transformar en una cómoda cama para tender en el suelo para ver la televisión o, apoyado contra la pared, se convertirá en un sillón con respaldo. , ideal para leer y descansar.
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