Indignación por el caos del voto por correo: «Es un desastre lo que está haciendo este Gobierno»
Correos está viviendo un auténtico caos debido a la falta de previsión respecto a la alta demanda del voto por correo para las elecciones generales del 23J. Esto ya se ha traducido en un cabreo generalizado entre los ciudadanos, que además de verse obligados a acudir a votar o incluso a estar en una mesa electoral en pleno verano, ahora tienen que soportar largas colas -de hasta seis horas- en algunas oficinas para poder votar por correo.
La indignación se refleja en el vídeo que acompaña a estas líneas. Decenas de personas se agolpan, bajo el sol, a las puertas de las oficinas de Correos, donde en algunos casos tienen que hacer dos colas para poder entregar el sobre con su voto. «Esto es una vergüenza, esto no se le hace a los ciudadanos. Yo estoy indignada, que le expliquen a mis hijas que se retrasan las vacaciones», dice una de las ciudadanas que se encuentra haciendo la cola. Otro de los entrevistados va más allá: «Esto es un puto desastre. Lo que está haciendo este puto Gobierno. Aquí hay que votar a muerte, a por ellos, a tomar por culo».
Por su parte, otro hombre denuncia que tuvo que hacer «seis horas de cola para votar» en una oficina del barrio madrileño de Entrevías. «Yo ya he venido tres o cuatro días para intentarlo después del trabajo y no me ha dado tiempo», asegura un joven ante las cámaras de OKDIARIO.
Otro de los entrevistados señala en su conversación con este medio que «esto es un poco desastre porque no había personal suficiente para gestionar esta avalancha. Además, se ha retrasado mucho la entrega de la documentación y al final es un caos para depositar el voto». «Yo no entiendo esto, ellos ya sabían que en un mes de julio tienen que reforzar la plantilla o que hubieran puesto las elecciones en otra fecha. Me dices que me lo pones en julio y encima tengo dificultades para votar, pues me cabreo», agrega al respecto.
«Yo estoy enfadada, más que por las colas, por cómo se hace todo; que se tengan que hacer unas elecciones en pleno verano, cuando se sabe que la gente no va a estar. Yo, por ejemplo, entro de vacaciones a un hotel el mismo día en el que se vota, y he tenido suerte porque no me ha tocado mesa electoral; si le llega a tocar a alguien de mi familia, ya nos fastidia las vacaciones», apunta otra de las entrevistadas.
Otra mujer declara ante las cámaras de OKDIARIO que «esto responde a una estrategia, pero esto no le va a salir bien, sino que le va a salir en contra, porque si se piensa que la gente no a votar, están equivocados», señala. «Hay que reconocer que está petado. Sólo hay dos personas atendiendo. Es un desastre. Se nota que no hay suficiente gente para gestionar esta avalancha», sentencia otro de los entrevistados.