Bildu hunde la campaña del PSOE: «No hay duda de que apoyaremos un Gobierno de Sánchez»
EH Bildu lo tiene claro: volverá a apoyar un Gobierno liderado por Pedro Sánchez tras las elecciones generales del 23J para seguir siendo uno de sus socios preferentes en el Congreso. Lo que venía insinuando sutilmente el líder de los abertzales, Arnaldo Otegi, lo ha verbalizado de forma clara el portavoz de Bildu, Unai Urruzuno: «Si el menú del día es Feijóo o Sánchez, no tenemos ninguna duda de que apostaremos por un Gobierno de Sánchez». Un apoyo que puede resultar un lastre electoral para el PSOE, que trata de sacudirse antes de las generales del fantasma de sus pactos con Bildu y de una campaña del 28M marcada por 44 candidatos con pasado etarra.
Los de Otegi ya confirman sin contemplaciones que, si Sánchez les vuelve a necesitar para gobernar, no pondrán reparos a que siga otros cuatro años más en Moncloa. «Evidentemente, a EH Bildu le conviene que Sánchez siga en la Moncloa y no Feijóo», admitió el portavoz de la formación en una entrevista en Radio Euskadi. Lo hacía después de días en los que Bildu venía admitiendo, veladamente, que su apuesta para después de las generales era conformar un «frente amplio» de izquierdas.
El propio Otegi aseguraba esta misma semana que «no hay Gobierno progresista en el Estado español sin el concurso de las izquierdas soberanistas», recordándole al PSOE el papel clave de Bildu para que Sánchez sea investido de nuevo. El mensaje que se trasmite a sus bases, para ofrecer un apoyo sin una contraprestación clara a corto plazo, es que Bildu hará «todos lo que esté en nuestras manos para que la derecha no gobierne». Ni Moncloa ni en el País Vasco. Y eso, implica un apoyo seguro, de nuevo, a Pedro Sánchez.
Sin embargo, tras la campaña del 28M se ha constatado que el apoyo parlamentario de Bildu al PSOE puede pasar factura electoral a los socialistas. Las listas con 44 etarras condenados, siete de ellos con delitos de sangre, fueron uno de los escándalos que marcó la campaña electoral del PSOE. La misma en la que Sánchez, como desveló OKDIARIO, terminó calificando ante su equipo más cercano de «campaña de mierda». Los resultados lo confirmaría, así como la decisión posterior de apartar a sus dos lugartenientes de campaña, Óscar López y Santos Cerdán, de la carrera al 23J.
De cara a las generales, Bildu ha dado muestras de no querer convertirse en un obstáculo para el PSOE de Sánchez. Una de las primeras decisiones que tomó Otegi fue que las listas del 23J no llevarían a personas condenadas por pertenencia a ETA. Algo que, tal y como ha sabido OKDIARIO, fue una petición de los socialistas a sus socios abertzales apenas 24 horas después del batacazo del 28M.
Apoyo seguro
La formación liderada por Arnaldo Otegi ha sido uno de los principales socios del Gobierno de Pedro Sánchez en el Congreso durante la última legislatura. Gracias a EH Bildu, el Ejecutivo ha podido sacar adelante leyes de gran calado como los dos últimos Presupuestos Generales del Estado (PGE) o la Ley de Vivienda. Sánchez regaló a Bildu la posibilidad de capitalizar el peso político de esa norma, permitiendo a los de Otegi y a ERC anunciar el acuerdo final sobre el texto.
Pero antes que todo eso, cabe recordar que el partido de Otegi apoyó a Sánchez en su moción de censura de junio de 2018 contra el Gobierno de Mariano Rajoy, llevándole a la Moncloa por primera vez.
Ataca al PNV
Bildu también utiliza su estrategia de regalar el apoyo al PSOE como arma arrojadiza contra el PNV, al insinuar que no apoyarán esta vez a un Gobierno liderado por Pedro Sánchez tras las elecciones generales y sí lo hará a uno del PP. «No voy a repetir el debate que hemos tenido anteriormente, entre Feijóo o Sánchez, las posiciones están claras. Parece ser que algunos partidos políticos aquí no lo tengan tan claro porque serán los que van a meter en la gobernabilidad del país al partido de Feijóo, pero EH Bildu lo tiene claro», señalaba el portavoz de Bildu en esa entrevista de este jueves.
El dirigente de EH Bildu cargó contra los de Iñigo Urkullu por querer aceptar los «votos gratis» del PP para así poder gobernar en coalición con el PSOE para desbancar a Bildu en aquellos lugares donde fue la lista más votada. Los de Alberto Núñez Feijóo ofrecieron desbancar a la formación de Otegi con sus votos. Sin embargo, nacionalistas y socialistas rechazaron que los populares pudieran entrar en estos gobiernos de coalición. «Es harto complicado meter al PP en los gobiernos», advirtieron.
El apoyo del PP al PNV y al PSE-EE provocaría que EH Bildu perdiera la alcaldía de Vitoria, que sería para los socialistas. La formación de Arnaldo Otegi tampoco podría gobernar en Durango (Vizcaya), Oyón (Álava), Cuartango (Álava), Cigoitia (Álava) y en la Diputación Foral de Guipúzcoa. En estas instituciones el beneficiado sería el PNV.