España se encamina hacia la producción cero de petróleo: cierra 2020 en el mínimo histórico
El giro hacia la producción de energías renovables de Repsol, dueña de los yacimientos de petróleo que hay en España, junto a la menor demanda de crudo por la crisis económica y el desplome de los precios del oro negro el año pasado ha llevado a España a prácticamente la ‘producción cero’ de esta fuente de energía en 2020. De esta forma, aumenta la dependencia del crudo de otros países, algo que ha sido así históricamente pero que ahora se recrudece.
De acuerdo con los datos de cierre de año de Cores -la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos-, España registró una producción interior de crudo de 27.537 toneladas, cifra incluso inferior a la desastrosa de 2019 -40.244 toneladas, la mitad que en 2018-. Se trata de la peor cifra de la historia, peor que en cualquier otra crisis económica que haya sufrido el mundo y España desde 1967 -último año registrado-.
Por ejemplo, en 1974 se registró una producción interior de petróleo de casi dos millones de toneladas, un millón en 1992 -fecha de otra crisis-, en 2001 ya se encontraba por debajo de las 300.000 toneladas, y desde 2018 no se superan las 100.000 toneladas. La caída es continua y el mínimo histórico se ha alcanzado en el año de la pandemia del coronavirus, con las citadas 27.537 toneladas.
España registró una producción interior de crudo de 27.537 toneladas, cifra incluso inferior a la desastrosa de 2019: 40.244 toneladas, que ya fue la mitad que en 2018
La cifra es irrisoria sobre el consumo de petróleo total del país, en gasolinas y gasóleos para los automóviles, querosenos para los aviones y fuelóleos para calefacciones y otros usos. En 2020, pese a que la demanda se redujo también a cifras desconocidas desde hace años por las restricciones a la movilidad y el cierre del turismo, España produjo internamente el 0,05% del crudo que consumió. El año pasado el país consumió un total de 48,71 millones de toneladas de crudo, con los gasóleos como derivado más utilizado. Es la peor cifra desde 1993, año que España vivió otra crisis económica.
Pozos en España
La producción interna de petróleo en España se limita prácticamente a una serie de yacimientos situados en torno a la plataforma de Casablanca, en el Mediterráneo, junto a la costa de Tarragona. Se trata de los pozos de Boquerón, Casablanca, Montanazo-Lubina y Rodaballo. Hay activo un quinto, Viura, en La Rioja, pero se extrae básicamente gas natural. Todos están operados por Repsol, que comparte la propiedad con Cepsa y Petroleum. El de Montanazo-Lubina es propiedad al 100% de la petrolera que preside Antoni Brufau y dirige Josu Jon Imaz.
La producción interna de petróleo en España se limita prácticamente a una serie de yacimientos situados en torno a la plataforma de Casablanca, junto a Tarragona: todos están operados por Repsol, que comparte la propiedad con Cepsa y Petroleum
En este 2020, prácticamente el 70% de la producción se ha extraído de un sólo pozo, Casablanca, que repite las cifras de 2019. Montanazo Lubina es donde se ha perdido toda la producción del año pasado, mientras el resto ha descendido en torno a un 40%.
Como es lógico, con el paso de los años los yacimientos se van agotando y resulta más caro extraer crudo. Si a eso se le añade el hecho de que el precio del barril de petróleo se ha movido en 2020 a precios muy bajos por la falta de demanda por los confinamientos a nivel europeo y mundial, el negocio de la producción de crudo deja de ser rentable.
De hecho, los expertos señalan que el precio del barril debe superar los 40 dólares para ser rentable, precio que no ha alcanzado en muchos momentos de 2020. Incluso llegó a estar en negativo en alguna fecha puntual por la falta de almacenamiento para los excedentes de producción.
Menos dinero para buscar petróleo
A esta circunstancia se suma que la petrolera española está dando un giro hacia las energías renovables y la electricidad. Su estrategia de emisiones cero para 2050 implica una apuesta por el mercado ‘verde’. Repsol es ya la quinta eléctrica del país por número de clientes y abordará importantes inversiones en generación de electricidad a través de energías renovables. En el plan estratégico 2020-2025, presentado recientemente, la inversión prevista en exploración es de 800 millones, frente a los 2.500 millones del anterior periodo.
La reducción de producción interna va aparejada de un incremento de la importación de crudo. Según los datos de Cores, Nigeria lidera las ventas de petróleo a España en 2020, seguido de México y Arabia Saudí. Entre los países exportadores de crudo a España está Irak, con más de 3.000 toneladas, Kazajistán, con más de 4.000, y Venezuela, con 1.400 toneladas.