El Madrid no arranca
El Real Madrid no termina de arrancar. El equipo de Zidane cayó derrotado por tercera vez en esta pretemporada ante un Tottenham que fue muy superior en la primera mitad. Keylor Navas evitó un castigo mayor para los blancos, aunque tampoco es menos cierto que el gol británico llegó de un fallo de Marcelo que por intentar evitar un saque de banda terminó concediendo un gol.
Los blancos mejoraron su cara en la segunda mitad con un Hazard muy incisivo y un sorprendente Kubo en los minutos finales. El Tottenham, sin embargo, también estrelló dos balones en el poste pudiendo ampliar su ventaja. El Madrid jugará mañana por el tercer y cuarto puesto contra el perdedor del Bayern-Fenerbahce.
El partido comenzó con un Tottenham presionando muy arriba y dominando la posesión. Los londinenses mordían aparentando ser físicamente superiores a los chicos de Zidane. Rodrygo, la gran sorpresa en el once del galo, era el único que rompía la monotonía de un Madrid que parecía embarcado en el bucle de estar jugando un partido del año pasado.
El Tottenham arrinconó al Madrid antes del minuto 20, pero un Keylor milagroso impidió varios goles con sendas paradas espectaculares. El costarricense, ante la baja de Courtois, se reivindicó siendo el mejor de los blancos en la primera mitad.
Tanto fue el cántaro a la fuente que al final se rompió. Marcelo parecía no haber aprendido nada de la derrota de la Supercopa de Europa del año pasado ante el Atlético. El lateral intentó salvar un mal pase largo de Hazard y su control –el balón salió del campo– dejó sólo a Harry Kane contra Keylor. El delantero inglés no perdonó anotando al palo corto, como marcan los nueves puros.
Hasta el momento el otro nueve del encuentro, Karim Benzema, no había aparecido. El Madrid, obligado por las circunstancias, se hizo con el balón y a punto estuvo de marcar. El delantero francés disfrutó de tres ocasiones en los últimos 20 minutos de la primera parte, pero por unas cosas u otras no encontró puerta estrellando incluso un balón contra el poste.
En esa mejoría blanca tuvo mucha culpa un Hazard que se movió en la mediapunta con total libertad generando mucho peligro con sus slaloms. El problema del belga, quizá, fue que pecó de generoso intentando involucrar a sus compañeros y como saldo el Madrid se fue a vestuarios sin haber conseguido tirar a puerta.
El Tottenham, sin embargo, daba muestras de que a la mínima podría anotar la sentencia con Keylor Navas sacando lo mejor de su repertorio en otro mano a mano con Harry Kane tras fallo en un despeje de Varane. El Madrid intentaba mostrar brotes verdes, pero en defensa no había manera.
En la segunda mitad sorprendió que Zidane no realizase ningún cambio. El francés quería que los suyos le diesen la vuelta a la situación y una señal de ello fueron diversas llegadas blancas que se produjeron. La pólvora, sin embargo, seguía mojada. Benzema no atinaba a tirar entre los tres palos, mientras que Hazard chocaba una y otra vez con los defensores del Tottenham.
El Tottenham, por si acaso, no se olvidaba de mandar regularmente avisos a los blancos. La euforia de los primeros minutos se tornó en respeto después de que un zapatazo de Son y un mano a mano de Dele Alli fuesen repelidos por un Keylor que parada a parada se gana su puesto como titular.
El ritmo bajó conforme se alcanzó el minuto 70. Zidane revitalizó al equipo con Vinicius entrando como un cuchillo por banda. Con el brasileño ya se sabe: mucho regate y poco remate. Su compatriota Rodrygo, sin embargo, sí encontró puerta a un cuarto de hora para el final tras conectar un centro de Marcelo. Su gol quedó anulado por fuera de juego.
Zidane terminó por mover todo su banquillo a diez minutos del final. Isco entró con los canteranos y los descartes en un detalle curioso. El único que destacó entre ellos, una vez más, fue un Kubo que obligó a Lloris a sacar lo mejor de su repertorio llegando a rematar en cinco minutos dos veces. El Tottenham respondía a ello con un tiro al poste de Parrott.
El Madrid sigue sin encontrar la chispa y el punch para convencer. Hay mejoras en la medular y Hazard de mediapunta da muchos juego, pero sigue habiendo errores de concentración impropios de un equipo que ha ganado todo lo ganable. Zidane debe seguir probando alternativas.