Carlos Alcaraz disfrutó de una espectacular fiesta de campeón en la noche de Nueva York en la discoteca Amber Room rodeado de sus amigos y famosos como fue el caso de J Balvin. Una fiesta llena de lujo y buena música donde el flamante campeón del US Open fue foco de atención de toda la fiesta.
Antes de esta fiesta, en el vestuario de la pista central del US Open, Carlos Alcaraz roció a todo su equipo con una botella de champán. Todos los presentes se bañaron en champán al grito de «¡campeones, campeones!». No era para menos, el español había hecho historia, otra vez, ganando un nuevo Gran Slam y conquistando por segunda vez en su carrera Nueva York.