Ana Obregón suelta la bomba y deja a todos sin palabras: «De lo único que me arrepiento…»

La noticia de hoy es triste, pero demuestra la gran capacidad que ha tenido su protagonista para salir adelante. El pasado miércoles 7 de mayo, Ana Obregón dio una entrevista muy especial. Invitada al programa Gente Maravillosa presentado por Toñi Moreno, compartió públicamente una visión íntima sobre su trayectoria profesional, su familia y el duelo por la pérdida de su hijo, Alessandro Lequio, fallecido en 2020 a los 27 años a causa de un sarcoma de Ewing. «De lo único que me arrepiento en la vida es de haber trabajado como un animal», ha empezado diciendo. Después de esto, todos se han quedado sin palabras.

Durante su conversación con Toñi Moreno, abordó con honestidad la intensidad de su carrera televisiva y cómo esta afectó a su vida personal. Con una trayectoria marcada por su presencia constante en la televisión española, especialmente en las décadas de los 90 y 2000, la presentadora lamentó no haber pasado más tiempo con su hijo durante su infancia. Reconoció que lo único que realmente lamenta de su vida es haber dedicado tantas horas al trabajo cuando Álex era pequeño, lo que le impidió disfrutar plenamente de su crianza y compañía en aquellos años.

Enumeró algunos de los programas que marcaron su carrera y que exigían jornadas laborales de más de doce horas: Ana y los 7, ¿Qué apostamos?, Hostal Royal Manzanares, A las once en casa, las retransmisiones especiales y las tradicionales campanadas de fin de año. Esta acumulación de compromisos profesionales, según relató, la mantenía alejada del hogar durante largas jornadas, una dinámica que ahora considera incompatible con lo que realmente valora en la vida.

Ana Obregón ha recordado que su hijo, durante los últimos momentos de su vida, le transmitió una enseñanza clave: lo más importante no son los logros materiales, sino el tiempo compartido con quienes se ama. Esa reflexión, explicó la presentadora, ha influido en sus decisiones actuales, especialmente en la forma en que vive la llegada de su nieta.

Un aniversario muy triste

El martes 13 de mayo se cumplieron cinco años desde el fallecimiento de Aless Lequio. En esa fecha, Ana Obregón decidió rendirle un homenaje personal y público a través de sus redes sociales, donde compartió una emotiva carta dedicada a su hijo. En el mensaje, expresó con claridad el dolor persistente que siente desde su pérdida, recordando el momento en el que se despidió de él entre sus brazos y reconociendo que, desde entonces, su vida se detuvo.

En su publicación, Ana compartió que el nacimiento de Aless fue el verdadero inicio de su propia vida y que su muerte también significó un punto final. Manifestó cómo el vacío de su ausencia no ha dejado de crecer, a pesar de la llegada de su nieta Anita, que nació en marzo de 2023 como resultado del cumplimiento del último deseo de su hijo.

 

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La bióloga defiende públicamente su decisión de traer al mundo a su nieta, pidiendo a Aless que no sufriera por las críticas que ha recibido por ese motivo. Recalca que fue el propio ejemplo de valentía de su hijo en la lucha contra el cáncer lo que le dio fuerzas para afrontar ese proceso y seguir adelante.

En este mismo mensaje, Ana aseguró que su nieta le ha devuelto las ganas de vivir y que, al ver su sonrisa y sus gestos, siente una conexión directa con su hijo. Cerró su homenaje con una frase dirigida a él: cada noche, cuando el mundo duerme, siente que se funden en un abrazo eterno.

La postura de Alessandro Lequio

Mientras Ana Obregón abría su corazón en las redes, Alessandro Lequio optó por mantener su rutina diaria. El colaborador acudió al programa Vamos a ver, donde mantuvo su habitual participación sin aludir a la fecha ni al homenaje realizado por la madre de su hijo. Posteriormente, se le vio en uno de sus restaurantes habituales de Madrid, en compañía de amigos.

A la salida del local, una conocida agencia le ha preguntado por la emotiva carta publicada por Ana Obregón. Sin embargo, Lequio prefirió no pronunciarse, mantuvo el silencio ante las preguntas y se dirigió cabizbajo hacia su vehículo sin ofrecer declaraciones. Esta actitud es coherente con la postura que ha mostrado en otras ocasiones, en las que ha manifestado su preferencia por vivir su duelo en la intimidad.

Las palabras de Ana Obregón han generado un notable impacto por la sinceridad con la que ha abordado un aspecto difícil de su pasado: haber priorizado el trabajo por encima del tiempo familiar. Su reconocimiento no solo refleja un cambio en su escala de valores, sino también una forma de alertar sobre lo que realmente importa en la vida desde su experiencia personal.

Con una carrera profesional sólida y mediática, la presentadora representa para muchos un símbolo del entretenimiento en España. Sin embargo, su testimonio actual pone el foco en una etapa diferente, en la que el recuerdo de su hijo y el cuidado de su nieta ocupan el centro de su vida, desplazando la exposición mediática y los compromisos profesionales que antes la definían.