¿Filosofía machista?
¿Te imaginas a tu hijo diciendo que no quiere estudiar filosofía porque está llena de machistas? Pues esta es la nueva propuesta presentada por el “intelectual” Gobierno, que solicitó a editoriales de gran prestigio redactar los textos de filosofía con frases como éstas: ‘Oxford: En casos extremos como el de Nietzsche, el menosprecio es animadversión. Hay casi unanimidad antes del siglo XX en presentar a la mujer como un ser inferior. Mc Graw Hill: La ética de Nicómaco es un libro del patriarcado para chicos. Dialogo: Platón, Aristóteles Rousseau, Ortega, todos difaman el intelecto de la mujer.’
Al igual que en Madrid, donde por suerte, el Ayuntamiento y el consejero de Educación han rechazado esta propuesta, en el resto de España depende de sus propios gobiernos autonómicos el que estos textos se autoricen o no, ratificando la sensación cada vez más extendida, de que la educación se ha convertido en un arma ideológica. Sinceramente no encuentro palabras para expresar mi más profunda indignación ante aquellos que pretenden hacer de la filosofía un espacio de ideologización, utilizando el reduccionismo más cínico que hayamos podido ver.
Querer mostrar a los filósofos como machistas, y presentarlos de forma sesgada (descontextualizados), o incluso eliminarlos de la cátedra de filosofía, es de una ceguera intelectual grave. Una de las cosas que he aprendido de la filosofía y de la ciencia, es que los hechos nunca se deben estudiar fuera del contexto. Si para algo nos sirve la historia, es para analizar y entender todos los componentes de un momento histórico.
Atacar con argumentos de hoy a Platón porque defendía el esclavismo hace 23 siglos, o a Schopenhauer y Nietzsche porque denigraban a la mujer (hace 3 y 2 siglos respectivamente), es como si pusieran a la inquisición a opinar sobre la enseñanza actual de las matemáticas con perspectiva de género. ¿Verdad que no tiene sentido?
Ahora, que quede claro, es verdad que algunos filósofos eran machistas, pero esto sucedía porque la época histórica en la que vivieron lo era, y la sociedad entera se comportaba de esta manera. Y esta es la forma en que se debe enseñar. Hoy la situación es muy diferente, y estoy segura de que ninguno de los filósofos actuales haría comentarios displicentes sobre las mujeres. Pero la verdadera gravedad de todo es que el nuevo sistema de enseñanza está creando jóvenes a los que no se les va a enseñar a pensar. Los niños son curiosos por naturaleza, y a partir de los 12 años empiezan a plantearse las tradicionales preguntas filosóficas: ¿Quién soy? ¿Cuál es el sentido de mi existencia? Justo en ese momento y hasta los 16 años, cuando cursan la ESO, resulta que se han eliminado las horas obligatorias de Filosofía, y sólo hay una materia opcional que se llama “Ética y valores”, que es una mezcla de ideas, pero no es Filosofía propiamente dicha.
En primero y segundo de bachillerato, recibirán 3 horas semanales de Historia de la Filosofía, que en lugar de hacer pensar, mostrará una Filosofía sesgada, tal como vimos en los libros de texto que antes mencioné. Así que adiós a las horas de pensamiento y reflexión de tus hijos. Pero recuerda, si los jóvenes no logran resolver esas cuestiones e inquietudes acerca de su propia existencia desde el colegio, muy seguramente comiencen a buscar respuestas en la música del momento, en la calle, en los videojuegos, en los amigos, y lo que es peor, en las drogas. Si para algo deben servir la Filosofía y los filósofos, es para no dejar que caigamos en adoctrinamientos ideológicos, que al final, lo único que buscan es que los jóvenes piensen de manera sesgada, creando y manipulando una sociedad de borregos.
*Dedicado a todos mis profesores de Filosofía, porque gracias a ellos aprendí a pensar.