Las curiosidades más locas del Gin Tonic que te dejarán atónito

El gin tonic se ha convertido a lo largo de los años en una de las bebidas más populares del mundo. Su historia centenaria crea numerosas historias y curiosidades sobre ella, que muchas veces ni los bebedores más apasionados conocen. Producción, cultivo, historia . Echemos un vistazo a algunas de las curiosidades más locas del Gin Tonic que te dejarán atónito y que nos servirán para celebrar en el día de hoy, el Día Internacional del Gin Tonic.

Las curiosidades más locas del Gin Tonic que te dejarán atónito

Degustar un buen gin tonic puede ser la mejor manera de celebrar el día internacional dedicado a este famoso coctel, pero además también podemos sorprenderos con algunas de sus curiosidades más locas como estas que ahora os explicamos:

 Nacimiento en el siglo XIX

La primera curiosidad se refiere al nacimiento del cóctel a base de ginebra: según la leyenda, nació entre 1700 y 1800, cuando el ejército inglés se enfrentó a la India, y para combatir la malaria los soldados solían beber quinina: útil tanto para prevenir que para curar la terrible enfermedad. Esta sustancia muy amarga y desagradable se diluyó en agua tónica, pero el sabor siguió siendo difícilmente soportable. Entonces alguien intentó, como dicen, endulzar remedio y para ello utilizó azúcar, limón, ginebra. Y ¡listo! El colonialismo y el Imperio Británico hicieron el resto, extendiendo la mezcla por todo el mundo.

Cuándo poner el agua

Otra cosa que no todo el mundo sabe es que para preparar un gin tonic perfecto hay que añadir la tónica lo más tarde posible, un pequeño secreto del oficio que permite la preparación del cóctel de la mejor forma. Esta práctica también es amada y recomendada por el chef de renombre internacional Heston Blumenthal, quien explica cómo los aromas de la ginebra se pueden liberar mejor antes de mezclar, mejorando enormemente su sabor.

Las variantes aceptadas

Otra curiosidad que no todo el mundo conoce es que además de la habitual rodaja de limón, el gin tonic también se puede preparar con otras variaciones muy ligeras: no son pocos, de hecho, a los que les gustan de este cóctel con dos gotas de amargo de angostura (una preparación a base de alcohol y compuestos botánicos); otros, en cambio, incluso lo hacen más salvaje con una ramita de romero.

Sin agitar, sin mezclar

Ni la tónica ni la ginebra se deben remover durante la fase de preparación, ni se debe mezclar el cóctel: quien lo hace no es un barman profesional, al contrario.

Y sin hielo

Otra curiosidad que abrirá que dejará «locos» a muchos amantes de este coctel es que el verdadero gin tonic debe beberse sin hielo: diluir un destilado seco puede no ser lo mejor, sobre todo si la ginebra es de buena calidad. Los más radicales incluso desaconsejan una rodaja de limón, afirmando que solo los dos ingredientes principales son los que se deben tomar.