Venezuela emite una orden de captura internacional contra el piloto que atacó al Supremo
El Gobierno de Venezuela ha emitido una orden de captura internacional a través de la Organización Internacional de la Policía Criminal (Interpol) contra Óscar Pérez, el piloto del helicóptero que en la víspera atacó las sedes del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y del Ministerio de Interior en Caracas, tal y como ha anunciado el ministro de Interior, Néstor Reverol.
En declaraciones ante los medios y recogidas por Venezolana de Televisión (VTV), Reverol ha reiterado que el martes desapareció un helicóptero del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CIPC) en la base aérea de La Carlota, en la capital venezolana.
Reverol ha señalado que fue Pérez, un «desertor» del cuerpo, quien robó el helicóptero que luego sobrevoló las instituciones del Gobierno portando una pancarta en la que se podía leer ‘350 Libertad’ -en referencia al artículo 350 de la Constitución- y desde el que, según denunció el propio presidente, Nicolás Maduro, lanzó varias granadas contra los edificios.
Relación entre el piloto y EEUU
El ministro ha subrayado que la aeronave, que fue hallada en la zona norte costera del estado Vargas, en la comunidad de Osma, está considerada «hostil» y ha asegurado que existe una relación «directa» entre el piloto de la misma y «agencias de Inteligencia de Estados Unidos».
Pérez usó el helicóptero para disparar contra el TSJ y el Ministerio para, según explicó después en varios vídeos, restablecer el «orden constitucional» en Venezuela y exigir a Maduro que dimita y convoque elecciones anticipadas.
Maduro ha calificado de «ataque terrorista» este hecho y ha dado instrucciones para localizar a Pérez y detectar posibles células que puedan estar preparando nuevos atentados. La oposición, por su parte, ha indicado que podría ser una distracción para desviar la atención del asalto que de forma simultánea tuvo lugar en el Parlamento.
Estos hechos se enmarcan en la crisis política que sufre Venezuela. Desde abril, la Mesa de Unidad Democrática (MUD) ha protagonizado multitudinarias manifestaciones en Caracas y otras ciudades para denunciar la injerencia del Gobierno en otros poderes del Estado. Alrededor de 80 personas han muerto y miles han sido detenidas.