Un informe del Gobierno en plena crisis diplomática advierte que Marruecos es clave para la recuperación
El Plan de Acción para la Internacionalización de la Economía Española 2021-2022, presentado esta semana por Pedro Sánchez, admite que Marruecos tiene una importancia estratégica clave para los intereses españoles.
El documento adquiere así una especial relevancia en plena crisis diplomática con el país por la acogida del líder del Frente Polisario Brahim Ghali.
Así, se señala que «África es para España una región de especial interés, entre otros, por motivos comerciales y económicos». Por ello, «lograr un mejor posicionamiento de las empresas españolas y una sólida presencia española de cara a participar en el futuro crecimiento del continente es, por tanto, un objetivo a perseguir en nuestra política comercial exterior».
En este contexto, Marruecos adquiere una especial relevancia. El informe destaca que el país es «por cercanía geográfica, un socio natural para España con fuertes vínculos comerciales y de inversión».
A continuación se enumera la importancia estratégica del país, con cifras como que, en 2019, el 45,5% de las exportaciones españolas a África tuvieron como destino Marruecos. En 2020, la tasa aumentó hasta el 47,3% y en enero de 2021 creció hasta el 50,1%.
«Además, hay 781 empresas españolas con más de un 10% del capital de sociedades de derecho marroquí y 674 empresas de derecho marroquí que son filiales de empresas españolas».
Así, prosigue el informe, «ambos países presentan economías fuertemente interrelacionadas en sectores claves como la energía, y las cadenas de valor en el sector automovilístico y textil entre otros. En un contexto de acortamiento y reposicionamiento de las cadenas de valor como el actual, el rol de Marruecos puede ser clave desde el punto de vista estratégico, a lo que se une su rol como puerta de entrada a África, uno de los principales focos de actuación del plan».
Terrorismo
En otro momento, el documento recoge también las recomendaciones del Ministerio del Interior sobre «la necesidad de incorporar una mención específica a África». «Y muy especialmente al Norte de África (Marruecos y Argelia), a la fachada atlántica africana (Mauritania y Senegal), al Sahel y a África subsahariana».
«Éstas áreas geográficas son prioritarias para los intereses españoles en materia de seguridad e inmigración», recuerda el informe, presentado por Pedro Sánchez.
El documento recuerda la «evolución negativa» de la «presión migratoria irregular» el año pasado «singularmente en las islas Canarias». Por ello, concluye que «la actividad del sector económico español en las regiones y países señalados debe seguir coadyuvando como incentivo positivo que facilite la mejor y mayor colaboración de las autoridades de estos países en la prevención de los flujos de migración irregular y, por supuesto, de otras actividades criminales y delictivas, siendo el terrorismo y la criminalidad organizada las más relevantes».
Las relaciones con Marruecos atraviesan en la actualidad un momento delicado por la decisión del Gobierno español de acoger al líder del Frente Polisario Brahim Ghali para tratarse de Covid en un hospital de La Rioja.
El también presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) viajó de Argel a Zaragoza en avión y desde allí fue trasladado a Logroño en una ambulancia medicalizada. Ghali entró en España con una identidad falsa.
La decisión de Pedro Sánchez provocó la reacción de Marruecos, en forma de una avalancha de más de 10.000 inmigrantes ilegales a través de Ceuta.
Aviso de Marruecos
La crisis diplomática con Marruecos está lejos de remitir. Este jueves, la embajadora en Madrid Karima Benyaich acusó a la ministra de Exteriores Arancha González Laya de realizar declaraciones «inapropiadas» y presentar «hechos erróneos» en la actual crisis, en la que estaría en juego el «respeto mutuo» entre los dos países vecinos.
La embajadora consideró que la crisis «ha desvelado las verdaderas intenciones implícitas y motivaciones de ciertos círculos en España, que persisten en querer dañar a los intereses superiores del Reino (de Marruecos) desde la recuperación del Sáhara marroquí en 1975».
«Marruecos toma nota y actuará en consecuencia», avisó Benyaich en su mensaje.