Torres regala la última victoria al Calderón
El Atlético puso punto y final a 51 años del Vicente Calderón con una victoria por 3-1 ante el Athletic. No podía ser de otra manera, no podía ser otro, tenía que ser Fernando Torres. No ha sido su mejor temporada pero siempre aparece en las grandes ocasiones y esta no iba a ser menos. El Niño se sumó a la fiesta con un doblete en los primeros 10 minutos de partido, que ponía muy de cara el encuentro para los del Cholo.
Sin laterales y sin Giménez ni Godín, Simeone tuvo que recurrir a Thomas y Saúl para completar la defensa. El 22 ya ejerció de lateral derecho ante el Eibar, mientras el 8 tuvo que cubrir el hueco de Filipe Luis en el flanco izquierdo, que era baja por sanción. También Tiago y Torres formaron parte del último once del coliseo rojiblanco.
Como en la despedida del Metropolitano, el Athletic era el rival a batir en el último duelo. Los vascos se jugaban una plaza en la próxima edición de la Europa League. Sin embargo la motivación era mayor en los locales, que pese a no jugarse nada, salieron como si de una final se tratara. Querían regalar una última victoria al Vicente Calderón.
Los de Valverde empezaron dormidos y lo pagaron caro. En el minuto ocho abría el marcador Fernando Torres a pase de Griezmann de cabeza. Tres minutos después, con el Athletic grogui, llegaba el 2-0, de nuevo, obra de El Niño. Fue su tarde y vaya tarde, la mejor desde que regresara al Atleti en 2014. Sin hacer gran cosa el Atlético se puso con dos goles de ventaja en apenas 10 minutos.
El conjunto bilbaíno empezó a dar pequeñas señales de vida tras el segundo tanto. Sin casi intensidad y como si no se jugaran nada, los pupilos del Txingurri se marcharon al descanso tras una gris primera parte. Valverde reaccionó en la reanudación y quitó a Iturraspe para dar entrada a Iñaki Williams.
Quería más pólvora en ataque. Pero el Athletic no terminaba de reaccionar. El Atleti se encontraba muy cómodo y disfrutando de su fiesta. Estaba más cerca el tercero que el primero de los visitantes. Carrasco tuvo el 3-0 en sus botas hasta en dos ocasiones. Pocos minutos después Torres anotó el tercero pero la jugada quedó invalidada por fuera de juego de Griezmann. Era el hat-trick de El Niño, que redondeaba una de sus mejores noches como rojiblanco. Aún así se marchó ovacionado y aplaudido por todo el Calderón que se puso en pie para despedir a una leyenda viva del Atlético.
Correa hace el último gol del Calderón
Tras el gol reaccionó levemente el Athletic. Ya sin Raúl García en el campo, que se marchó ovacionado de su último partido en el Calderón, Iñaki Williams recortó distancias, con algo de fortuna tras tocar en Savic, en el 70 para dar esperanzas a los bilbaínos. Pero no fue más que un espejismo. Jan Oblak no tuvo apenas trabajo.
En el 87 llegó uno de los momentos más esperados. Tiago, que recientemente había comunicado que no seguiría en el Atleti la próxima temporada, era sustituido. El portugués, que portó el brazalete de capitán durante todo el encuentro, con permiso de Gabi, se retiró entre lágrimas. Todo el estadio se puso en pie para despedir a un jugador que ya forma parte de la historia de este club.
Poco después Correa sentenció el choque con el último gol de la historia del Vicente Calderón. Lo había buscado el Atlético durante toda la segunda mitad, fue superior y al final llegó el tanto en el 89. De esta forma se puso punto y final a casi 51 años de historia del Vicente Calderón con una victoria por 3-1 ante el Athletic, que termina séptimo tras el empate in extremis de la Real Sociedad.