Menú para la semana 40 de embarazo

Menú para la semana 40 de embarazo
40-menu

Ya sí que sí. No hay vuelta atrás. El bebé va nacer esta semana pues te encuentras en la última del embarazo, la número 40. De ahí que te halles especialmente nerviosa a la par que ilusionada y que te cueste dormir. Pero no sólo eso, posiblemente tengas mucha presión en la zona baja del vientre, porque se ha colocado para salir al exterior, y que incluso, en ciertos momentos, puedas tener ciertas contracciones no regulares que te indiquen que el parto es inminente.

Pero hasta que se produzca el alumbramiento es fundamental que te cuides, como has venido haciendo durante todo el periodo de gestación. Es la forma de que estés en las mejores condiciones para poder hacerle frente en plena forma al llamado trabajo de parto. Por eso, además de salir a caminar a diario, no dudes en seguir una dieta sana, equilibrada y completa como la que te proponemos a continuación:

Desayuno

Para poder comenzar el día con energía, porque nunca se sabe si a lo largo del mismo romperás aguas y tendrás que marcharte al hospital, toma una primera comida contundente y que, por supuesto, sea saludable. En concreto, debes seguir la misma recomendación que te hemos venido dando durante toda la serie de Menú para embarazadas: que el desayuno se sustente en tres pilares fundamentales. Es decir, que incluya los siguientes tipos de alimentos:

  • Cereales, que se pueden tomar de muy diversas formas. En concreto, puedes optar por un puñado de cereales tal cual con un poco de yogur líquido, un poco de bizcocho, unas galletas integrales o bien una buena tostada de pan integral con aceite de oliva.

  • Lácteos. Estos deben incluirse sí o sí en el desayuno y deben hacerlo a través de un vaso de leche semidesnatada, que se podrá “acompañar” con un poquito de cacao o de descafeinado.

  • Fruta, bien a través de una pieza, como puede ser el kiwi, o mediante lo que es un zumo natural recién exprimido.

Media mañana

Tener bajo control el hambre y evitar problemas tales como un desmayo por falta de alimento son los objetivos que se consiguen apostando por tomar algo en torno a las 11:30 o 12 horas del mediodía. En ese caso, lo más recomendable es ingerir un puñado de frutos secos, una pieza de fruta distinta a la que se comió en el desayuno, un yogur desnatado o bien incluso unas cuantas aceitunas y un poquito de mosto, vamos un aperitivo en toda regla.

Almuerzo

Llega el momento de la comida más importante del día, o al menos la más contundente, y es fundamental que también la lleves a cabo siguiendo una serie de recomendaciones en pro de que sea lo más saludable y completa posible. Y es que estás en la semana 40 de embarazo y necesitas encontrarte en las mejores condiciones de salud para hacerle frente no sólo al parto sino también a un nuevo cambio en tu vida: el cuidado de tu bebé.

Por ese motivo, los expertos en nutrición recomiendan que el almuerzo debe componerse de tres partes:

  • Primer plato. Para comenzar debes elegir una receta de entre las que se consideran más sanas como entrante: ensalada, crema de verduras, gazpacho, lentejas con verduras o salmorejo.

  • Segundo plato. Para continuar hay que seguir el mismo proceso, decantarse por un plato entre los que se establecen como más aconsejados para esta etapa del periodo de gestación: filete de pollo o pavo a la plancha, ternera a la jardinera, pescado al horno…

  • Postre. Como siempre, para acabar el almuerzo, nada mejor que comer una pieza de fruta o bien un pequeño bol de macedonia.

Merienda

A media tarde, también es necesario que ingieras algún alimento especialmente para que tu organismo esté funcionando perfectamente y para que puedas mantener el hambre a raya. ¿Qué se recomienda tomar? Se debe elegir una alternativa entre las siguientes que indican los nutricionistas: sándwich de jamón cocido y queso, zumo o batido natural de frutas, un yogur con cereales y trocitos de fruta…

En el caso de que se apueste por tomar la citada fruta es importante que se opte por una diferente a la que se ha podido ingerir en otras comidas del día, para que así el cuerpo reciba distintos tipos de vitaminas.

Cena

Ligera y saludable. Así es como debe ser la cena, ya que es la manera de evitar digestiones pesadas que puedan dificultar el conciliar el sueño, algo que en estos momentos resulta de por sí complicado ante los nervios que se tienen por la llegada inminente del parto. Por eso, lo mejor que se puede hacer es apostar por tomar una ensalada y unas croquetas, una sopa y un poquito de pescado a la plancha o una crema de verduras y un filete de pollo a la plancha.

Ni que decir tiene que el postre, en este caso, debe ser una de las infusiones que sí están recomendadas y permitidas para embarazadas.

Lo último en Bebés

Últimas noticias