El guateque ‘oficial’ de Pilar Alegría: 121 litros de cerveza para el PSOE pagados con dinero público

Siguen aflorando más detalles contradictorios del famoso almuerzo ‘oficial’ de Pilar Alegría celebrado en el Burgo de Ebro (Zaragoza). Nos referimos a la visita de la ministra de Educación y Deportes, Pilar Alegría, en plena campaña electoral, el pasado julio, a uno de los feudos socialistas de la provincia aragonesa.

En el Burgo de Ebro, el PSOE lleva gobernando desde 1983 de manera interrumpida y siempre con mayoría absoluta. Es posible que esto sea lo que hubiera confundido a su alcalde, Vicente Royo Martínez, y a su equipo de Gobierno del Ayuntamiento, para incluir en gastos institucionales un gasto de partido en toda regla.

OKDIARIO ha tenido acceso a la factura del almuerzo que organizó el socialista para agasajar a su paisana, Pilar Alegría, quien acabó ausentándose a los pocos minutos. En ese momento, la zaragozana encabezaba la lista a diputada nacional por Zaragoza, e iba acompañada de su amiga y también candidata Susana Sumelzo, a quien Pedro Sánchez le ha premiado recientemente como secretaria de Estado para Iberoamérica y el Caribe.

La factura del guateque: 121 l de cerveza, es decir, 391 tubos

Según consta en la factura emitida por el establecimiento del bar de las piscinas municipales, donde tuvo lugar el ágape, la comida costó 2.410,70 euros. Pero, salvo por las croquetas y algún plato de calamar, donde se fue el dinero fue en las cervezas. Hasta 121 l de cerveza, es decir, 291 tubos, se bebieron los socialistas.

El almuerzo «institucional» con la ministra Pilar Alegría se prolongó durante horas, argumentó el alcalde del Burgo de Ebro.

Según expresó, la justificación de incluir una partida en los gastos del Ayuntamiento, en concepto de «servicio de catering para almuerzo por la visita de nuestra ministra de Educación, Pilar Alegría», se debió a que esta comida era la culminación de la parte institucional de la visita, tras la firma en el libro de honor, y donde la ministra se interesó por el nuevo instituto que se iba a construir en el pueblo.

Royo reconoció en el último pleno celebrado en el Burgo de Ebro, que efectivamente, la presencia de Pilar Alegría se había precedido de un acto político de partido, pero que en la segunda parte, se habían tratado asuntos del pueblo.

 

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Sin embargo, las explicaciones no convencieron al portavoz del PP, José Luis Borruel, quien detectó el pago por parte del Ayuntamiento, a raíz de una investigación en la comisión de cuentas, tras reiteradas peticiones de las facturas al equipo de Gobierno. Es un hecho: a la comida, según el del PP, sólo habían sido invitado socialistas. Tanto es así que el alcalde terminó respondiéndole que «tenía razón».

Pilar Alegría: foto en el Burgo de Ebro y adiós

En dicho polémico pleno, el alcalde del Burgo de Ebro sacó un papel, y leyó un escrito que entregó como copia para que constara también en el acta. En él, Royo aseguraba que, en la firma del libro de oro, es decir, en esa parte institucional de la visita, «se había invitado al equipo de gobierno municipal, a la Junta de Asociación de padres y madres de alumnos del colegio público, vecinos del municipio que estaban en las piscinas y otro personal presente como la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil».

«Terminó el acto con un aperitivo en las piscinas municipales que afortunadamente se prolongó durante unas horas que fueron aprovechadas por miembros del equipo de gobierno municipal, de la asociación del colegio y algunos vecinos para trasladarle las inquietudes y mejoras que necesita nuestro pueblo», concluyó.

Sin embargo, fuentes próximas al establecimiento desmienten nuevamente al alcalde, Vicente Royo, y aseguran que el almuerzo organizado a la ministra fue, en realidad, un catering para los socialistas del pueblo; puesto que, en dichas piscinas municipales del Burgo de Ebro, aseguran que Pilar Alegría estuvo «cinco minutos», «a lo mucho 10». Es decir, el tiempo necesario para hacerse la foto y marcharse, mientras que al recinto llegaron hasta 80 personas a fines al partido, con los familiares, aseguran.

Pese a ello, y tras abonar el PSOE el importe de la factura tras solicitar el PP la partida de los presupuestos destinada a abonar con dinero público dicho almuerzo, los socialistas siguieron con el asunto, insistiendo en que actuaron «correctamente», y que decidieron realizar dicho pago por las dudas sembradas por el PP, mientras realizaban «las consultas jurídicas pertinentes».

Ante lo cual, el PP ha decidido presentar una moción de reprobación al alcalde, como máximo responsable de la Corporación y contra la teniente de alcalde, Cristina Martínez, concejal de Deportes, Empleo, Sanidad, Economía, como responsable de la actividad económica.

La moción se celebrará el próximo marzo, es decir, justo tres meses después de la anterior. El motivo se debe a que desde el Consistorio se niegan a la celebración de un pleno cada dos meses, como ha solicitado reiteradamente el PP, argumentando que el Burgo de Ebro tiene un presupuesto de unos 5 millones de euros y son actualmente cerca de 2.400 vecinos.

Además, los populares se quejan de que las actas no refleja con fidelidad lo que sucede en los plenos, como en el anterior, donde no consta misteriosamente la pregunta formulada del edil al alcalde sobre el almuerzo, por lo que han propuesto que se graben, como en otros municipios de alrededor. Algo que de momento ha contado con la negativa frontal del PSOE.