Marruecos

Exteriores calla 5 días después de que el Polisario secuestrara a un español para vengarse de Sánchez

Polisario
El ministro de Exteriores, el activista detenido y Brahim Ghali.
Luis Miguel Montero

El Ministerio de Exteriores no se ha pronunciado todavía sobre el secuestro por la Policía del Frente Polisario del activista español Mohamed Salem Souid Malanaine, que desapareció el pasado 30 de abril en la frontera entre Marruecos y Argelia. Por eso, la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos (Asadeh) ha enviado una carta a Jorge de Lucas Cadenas, cónsul general de España en Orán (Argelia), pidiendo protección consular para Mohamed. De momento, en Exteriores callan cinco días después de que el Polisario secuestrara a un español para vengarse de Pedro Sánchez por el cambio de política sobre el Sáhara del Gobierno español.

La carta de Asadeh pidiendo la intervención de Exteriores, que todavía no se ha pronunciado sobre este asunto, recoge que «en primer lugar es un honor para mí y para todos los que componemos esta asociación dirigirnos a usted para informarle que un activista anticorrupción en el Polisario, de nacionalidad española, ha sido víctima de una detención arbitraria en los campamentos del Polisario en Tindouf a manos de la gendarmería de esta organización, y parece que ha sufrido duras sesiones de torturas desde el pasado día 30 de abril hasta el día de hoy sin que sus familiares sepan nada de su paradero. Asimismo desde esta asociación le solicitamos que se le dé la atención y protección consular necesaria para preservar su integridad física y esclarecer su destino y los motivos reales de esta detención injustificada e ilegal».

El detenido por el Frente Polisario, Mohamed Salem Souid Malanaine, es un español nacido en el Sáhara mientras esta región era provincia española, en concreto en 1974 y, por tanto, tiene DNI español. Salem tiene su domicilio habitual en Hernani (Guipúzcoa). El activista anticorrupción desapareció el pasado 30 de abril en la frontera entre Marruecos y Argelia.

Tras la carta, Exteriores tiene conocimiento formal de que un español se encuentra en una cárcel del Polisario, sin garantías jurídicas tras ser detenido en la frontera con Argelia. Este secuestro ha sido interpretado como una llamada de atención al Gobierno español después de que Pedro Sánchez se haya alineado con Marruecos y le haya dado la espalda al Polisario que lidera Brahim Ghali. En abril de 2021, Ghali se introdujo en España de manera clandestina para ser tratado de Covid, lo que desató una grave crisis con Marruecos.

La Asadeh fue quien dio la voz de alarma inmediatamente sobre el hecho de que «un ciudadano español de origen saharaui y activista anticorrupción Mohamed Salem Souid» había sido detenido «ante la mirada de los militares argelinos del control de entrada de la ciudad argelina de Tindouf quienes lo entregaron a los miembros de la seguridad del Polisario tras intentar  refugiarse en este Puesto Militar el día de ayer 30 de abril 2023».

Torturas

Después, «la única noticia que tenemos es que fue torturado en el momento de su detención y llevado a una prisión que se llama Dahbia en las cercanías de Rabuni y le tienen prohibido las visitas aún porque alegan que está en fase de interrogatorios», añaden.

En Hernani (Guipúzcoa) viven su hermana y sus sobrinos, que han mostrado su preocupación porque no saben nada de Mohamed desde su detención por el Frente Polisario. Según la Asadeh, «el secuestrado es sobrino del Coordinador del Movimiento Saharaui para la Paz (MSP), en la Región de Dajla y Río de Oro Abdallahi Berray».

La asociación también explica que «ante estos graves acontecimientos contra nuestra indefensa población en los campamentos de Tindouf exigimos la inmediata intervención de las autoridades consulares españolas para saber el paradero de Mohamed Salem, así como solicitamos la solidaridad de toda la sociedad civil y organizaciones defensoras de los derechos humanos. A la vez que hacemos responsables de estos atropellos contra nuestra población a la dirección del Polisario y a las autoridades argelinas al cometerse estos viles actos contra civiles indefensos sobre su territorio». Según la Asadeh, «vivimos una nueva ola de represión sin precedentes en la zona contra los opositores al Frente Polisario».

Hay que recordar que la estancia de Brahim Ghali, líder del Frente Polisario, en el hospital San Pedro de Logroño, hace justo ahora dos años, provocó una crisis diplomática con Marruecos que terminó con la destitución de Arancha González Laya, la ministra de Exteriores de Pedro Sánchez. Todo ello después de que el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, de Santiago Pedraz, reabriera una antigua investigación contra él por los delitos de genocidio, lesiones, detención ilegal, terrorismo, torturas y desapariciones.

Finalmente, Ghali compareció ante la Audiencia Nacional, pero el juez no apreció indicios de delito contra él y acabó archivando la causa, en contra del criterio de varias de sus víctimas cuando que lo habían denunciado tanto en España como en Marruecos. Tras la destitución de la ministra González Laya, Pedro Sánchez declaró por sorpresa el 18 de marzo de 2022, en contra de sus socios podemitas de Gobierno, que apoyaba el plan de el Sahara para que se convirtiera en una región autónoma de Marruecos.

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