El alcalde socialista de Palma erradica el español en el Ayuntamiento pero sí lo usa para pedir el voto
En la publicidad electoralista del PSOE no hay rastro de un catalán impuesto como lengua única desde que gobierna
El Ayuntamiento de Palma exige a todos sus funcionarios que atiendan “sólo en catalán” a la población
La empresa municipal de limpieza de Palma ya tiene solución a su mal servicio: más nivel de catalán
El alcalde socialista de Palma, José Hila, que ha erradicado el español en el Ayuntamiento durante las dos legislaturas que lleva el gobierno de coalición de PSOE, independentistas de Més y Podemos, sí que usa el castellano para pedir el voto a los palmesanos.
Que utiliza el castellano para pedir el voto en las elecciones municipales del 28 de mayo lo han podido comprobar los más de 20.000 vecinos de una de las zonas más pobladas de la capital balear a los que el PSOE de Palma, y no el PSIB-PSOE como suele suceder en las convocatorias oficiales a lo largo de la legislatura, ha convocado a una reunión.
Una cita con el alcalde en un bar de la calle Blanquerna este lunes 23 de enero para tomar un café y hacer publicidad del trabajo realizado por el primer edil de la quinta ciudad más sucia de España, la tercera más insegura y la que ha prohibido el uso del español a todos los funcionarios municipales, entre otras cuestiones.
En la convocatoria a los vecinos de la zona y a modo de anticipo, el PSOE de Palma ya enumera en un folleto escrito en castellano los supuestos logros alcanzados estos ocho años en este barrio, pero como comprueban a diario sus residentes, son más bien escasos.
Sobre limpieza y mantenimiento de calles y plazas, por ejemplo, nada se menciona en este folleto electoralista, ni sobre la promesa incumplida de construir un aparcamiento municipal o de la nefasta gestión del espacio municipal de S’Escorxador, entre otras cuestiones.
En el folleto publicitario se destaca, en primer lugar, el cambio de embaldosado de algunas calles, como el pavimento del parque de General Riera y las nuevas jardineras colocadas en la calle Blanquerna, el impulso a Bicipalma, los autobuses gratuitos de la EMT durante este año, la plantación de algunos árboles, y aunque el Psiquiátrico está bien lejos de la zona, el folleto resalta que el derribo del muro permitirá crear allí «el nuevo parque del barrio de Bons Aires».
Y como la publicidad lo aguanta todo, el alcalde sigue repitiendo el mantra de los 100 nuevos policías locales, cuando en realidad hay más de medio centenar de agentes menos en Palma al no haber cubierto las jubilaciones que se han producido estos años.
Eso sí, todo en castellano y sin rastro del catalán, muy al contrario de lo sucedido en las fiestas patronales de Sant Sebastià, donde el alcalde ha eliminado el español del programa oficial, al igual que lo ha hecho de los premios literarios Ciutat de Palma, bilingües hasta 2015.
Desde que Hila es alcalde, estos galardones sólo son para escritores en catalán, una de las dos lenguas oficiales de Baleares y cuya imposición en todo el ámbito público, incluida la enseñanza obligatoria, es un hecho en las Islas desde que los socialistas gobiernan en coalición con Més y Podemos, con Francina Armengol al frente del Ejecutivo balear y con Hila en la Alcaldía. Pero para pedir el voto a los ciudadanos sí que recurren al castellano y recuerdan que también es una lengua oficial.