Receta casera de chayotes guisados

El chayote, o Sechium edule, es una hortaliza mesoamericana, familia de la cucurbitáceas, es decir, de las calabazas y los calabacines. Su nombre proviene del náhuatl xayotl, y su origen se encuentra entre el sur de México y Honduras. Ha formado parte de la dieta precolombina desde tiempos inmemoriales. Es muy versátil, ya que combina muy bien con muchas preparaciones diversas, como esta receta casera de chayotes guisados. Su uso está muy extendido en el mundo, y con él se pueden preparar cremas, guisos y sopas, igual que con la calabaza.

Desde el punto de vista nutricinal, los chayotes tienen grandes beneficios para la salud: contienen mucha fibra, que contribuye a regular la digestión y combatir el estreñimiento, así como la retención de líquidos. Junto a ello nos hacen un gran aporte en vitamina C, que fortalece el sistema inmune. Además, tiene hierro y calcio, lo que lo convierte en un aliado de las mujeres embarazadas y de personas con problemas óseos, pero también de quienes sufren de anemia. Tiene muy pocas calorías y sus antioxidantes combaten los radicales libres. Por si fuera poco, también ayuda a reducir los niveles altos de colesterol.

Ingredientes:

Cómo preparar la receta casera de chayotes guisados:

1. Lavar bien las verduras.
2. Picar en brunoise la cebolla, el chile serrano y el ajo.
3. Cortar en cuadrados pequeños el tomate.
4. Pelar y cortar los chayotes en cuadrados medianos.
5. En una cacerola, echar un chorro de aceite de oliva.
6. Sofreír la cebolla, el ajo y los chayotes, hasta que la cebolla cristalice (cuidar que el ajo no se queme).
7. Agregar el tomate y el chile, salpimentar, tapar la cacerola y bajar al mínimo el fuego.
8. Dejar cocer 5 minutos, destapar y remover un poco.
9. Si está muy seco, se le puede añadir ½ taza de agua caliente.
10. Incorporar el perejil finamente picado, volver a tapar, y dejar cocinar por otros 5 minutos, hasta que el chayote esté suave.

Prepara esta receta casera de chayotes guisados y sírvelos como guarnición de platos de carnes rojas, que contrastan maravillosamente. Debes servirlos calientes, y si te gusta, puedes añadir una cucharadita de crema agria y queso como topping.

Es una preparación muy saludable y baja en calorías, que puedes combinar también con pescados a la plancha. Lo importante es que ambos, el plato principal y esta guarnición, se complementen tanto en textura como en sabores y nutrientes.