Canónigos y gulas al ajillo, receta casera

Los canónigos y gulas al ajillo son una buena combinación de nutrientes. De hecho, esta es una receta, cuyos ingredientes son económicos y se pueden adquirir en cualquier parte de Europa, y muy especialmente en España, donde el consumo de gulas se ha vuelto popular. Este alimento se ve habitualmente en la ingesta de cenas ligeras, saludables y muy nutritivas características de las tascas madrileñas. Comer gulas al ajillo un viernes por la noche en compañía de amigos ha sido una tradición desde finales del siglo XX, cuando inició la producción de este alimento, destacando la mundialmente famosa “Gula del Norte”, producto de origen vasco, altamente consumido en España.

Los canónigos y gulas al ajillo forman la combinación equilibrada. El ligero ácido de los canónigos armoniza muy bien con el sabor marino característico de las gulas. Estas son un derivado de diversos pescados y especies que poco tienen que envidiar a las angulas, excepto por su precio. En la actualidad, este producto se adquiere en los supermercados en cualquier temporada igual que los canónigos y el resto de los ingredientes de esta fácil preparación. Otra ventaja que ofrece esta receta es que se prepara en muy corto tiempo. 

Los antioxidantes y las proteínas saludables abundan en esta receta. En efecto, los canónigos constituyen la variedad de lechuga con mayor contenido de vitaminas A, C y E y minerales como el hierro, por lo que su consumo contribuye a combatir la anemia. Por otro lado, las gulas contienen nutrientes, pocos carbohidratos y casi nada de grasas, por lo tanto, pueden incluirse en una dieta sana para controlar el peso corporal. A continuación, te indicamos cómo preparar esta receta, paso a paso… ¡Sigue leyendo!

Ingredientes:

Cómo preparar canónigos y gulas al ajillo: 

1. Cortar los ajos y la guindilla en láminas muy finas.
2. Calentar el aceite en una cacerola y dorar los ajos junto con la guindilla. Es importante conseguir el punto en que los ajos se doran, pero sin llegar a quemarse.
3. Incorporar las gulas, mezclar y rehogar durante 2 minutos.
4. Rallar el tomate y colocar en un bol.
5. Añadir aceite y vinagre al tomate y batir con un tenedor o varilla hasta emulsionar.
6. Colocar los canónigos en una bandeja y salpimentar.
7. Incorporar las gulas al ajillo y la emulsión de tomates.

Esta preparación es una excelente opción para realizar cenas ligeras. Puedes acompañarla con una fina rebanada de pan tostado o comerla sola. Los canónigos y gulas al ajillo se preparan rápidamente. En 15 minutos elaboras una cena saludable y saciante para dos personas… ¡A cocinar!